Ya conocemos el aspecto de la PlayStation 4, una buena cantidad de sus juegos, y las especificaciones de su hardware. Pero algo que se ha mantenido relativamente oculto es el sistema operativo. En el caso de la PlayStation 3, varias investigaciones apuntaron a que su CellOS está basado en FreeBSD, y para la nueva consola, Sony habría tomado una ruta similar. El nombre por el que se lo conoce es “Orbis OS”, un build modificado que tiene como base a la versión 9.0 de FreeBSD. No hay ningún indicio sobre soporte para otros sistemas operativos en la consola, pero es demasiado pronto para negarlo por completo.
El hecho de que la nueva generación de consolas haya adoptado a la arquitectura x86, ha instalado ciertas posibilidades de desarrollo extendido. Aunque estamos completamente convencidos de que tanto Microsoft como Sony implementarán mecanismos que bloquean la ejecución de código externo, tampoco es un factor que vaya a detener por completo a los entusiastas. El ejemplo de Microsoft y su Xbox One parece, a simple vista, un poco más complejo, ya que en el conteo general son los tres sistemas operativos involucrados, uno para iniciar la consola (basado en Hyper-V), otro para todo el aspecto multimedia, y el último enfocado sobre los juegos.
¿Pero qué sucede con la PlayStation 4? Por ahora, no hay mucho más allá de algunas imágenes que publicó la gente de VGLeaks, obtenidas a través de un kit de desarrollo de segunda generación. Hasta que Sony diga lo contrario, el nombre oficial que circula es Orbis OS.
Este Orbis OS está basado en la versión 9.0 de FreeBSD, que dicho sea de paso, cumplió veinte años el pasado 19 de junio. Desde cierto punto de vista, Sony continúa con la misma línea de desarrollo que aplicó en el CellOS para la PS3, al que también se le reconocen múltiples raíces derivadas de FreeBSD. Por lo que se puede interpretar de las imágenes de GRUB, Orbis OS ofrece (lógicamente) un modo de texto y un modo con servicios completos de audio y vídeo. También hay otros detalles a tener en cuenta, como por ejemplo, la ausencia de un equivalente a un controlador Catalyst para FreeBSD.
Sabemos que el chip gráfico en la PS4 es un diseño de AMD a la altura de la Radeon HD 7870, e imaginamos que el gigante de Sunnyvale no tendría mayores problemas en desarrollar un controlador específico. ¿Llegará ese código a la comunidad? Habrá que esperar un poco más para saberlo, pero la espera es un punto crítico aquí. Los kits de desarrollo de segunda generación han estado circulando desde noviembre pasado, por lo que existe una chance de que se vea algo muy diferente en la consola final. Y sí, nos encantaría ver un soporte oficial para otros sistemas operativos. Sony hizo temblar el mercado con su política de juegos usados. ¿Podría repetir el efecto resucitando al “Other OS”?