El vehículo de exploración Opportunity está permitiendo a los científicos de la NASA dar un vistazo más profundo hacia el interior del planeta Marte encontrando en su camino rocas que presumen un pasado de gran actividad volcánica. El azar las ha colocado en el camino del vehículo y los investigadores no pierden la oportunidad de aprovechar estos hallazgos para conocer cada día más acerca de la evolución geológica del planeta. En este caso, una roca que ha sido bautizada como “Marquette Island” está proporcionando una inesperada y mejor comprensión de la composición mineral y química del subsuelo marciano. Hasta ahora, todas las rocas estudiadas habían sido autóctonas, superficiales de las zonas de exploración o procedentes de meteoritos, pero Marquette Island promete revelar algunos misterios llegados desde las profundidades del planeta. ¿De dónde proviene esta roca?
"Marquette Island es diferente en composición y características a cualquier otra roca conocida en Marte, ya sea autóctona o procedente de meteoritos", declaró Steve Squyres de la Universidad de Cornell. Squyres es investigador principal del veterano vehículo de exploración Opportunity y de su gemelo Spirit. "Es uno de los objetos más atractivos encontrados por el robot en mucho tiempo", añadió. Durante los seis años que lleva el robot explorando la superficie del planeta, en sólo una ocasión se ha producido un hallazgo tan relevante como el de esta roca. Otro pedrusco de similar tamaño capturó la atención de los científicos durante tres meses. Llamada Bounce Rock, esta roca poseía características muy similares a los meteoritos hallados en la Tierra provenientes de Marte. La conclusión unánime de los expertos determinó que este tipo de rocas proviene de erupciones volcánicas que las expulsan a enormes distancias.
Marquette Island es una roca compuesta de gruesos fragmentos en los que predomina el basalto. Esta composición indica que se enfrió lentamente a partir de roca fundida, dando tiempo a su cristalización. Esta estructura resultante les sugiere a los geólogos un origen en las profundidades de la corteza marciana, no en la superficie donde se habría enfriado rápidamente y su textura sería más fina. Squyres afirmó, además, que están convencidos de que proviene de profundidades importantes aunque no puede cuantificarse la magnitud de esta dimensión. Más allá de ese hecho, Marquette Island se diferencia de las demás rocas de basalto que los vehículos exploradores y las sondas hayan examinado. Su composición y su textura así lo determinan.
En una primera instancia los investigadores pensaron que se trataba de un meteorito más de los tantos que Opportunity ha encontrado. Sin embargo, un contenido mucho menor de níquel, respecto a las anteriores rocas halladas, indica que se trata de material de origen marciano. Además, el interior de la roca contiene una mayor concentración de magnesio que las típicas rocas de basalto que el vehículo Spirit ha estudiado. Los científicos están determinando si puede tratarse de una roca precursora alterada hace tiempo por el ácido sulfúrico que ha convertido en arenisca rica en sulfatos a la superficie de Marte que Opportunity está explorando. “Es como tener un trozo de otro sitio geográfico delante nuestro”, dijo Ralf Gellert de la Universidad de Guelph, en Ontario, Canadá. Gellert es el científico a cargo del “alpha particle X-ray spectrometer” ubicado en el brazo robótico del Opportunity. "A pesar de que los análisis pueden considerarse aún en una etapa muy temprana, continuamos trabajando sobre muchos enigmas acerca de esta roca".
El equipo encargado de la operación del vehículo Opportunity utiliza una herramienta abrasiva para pulverizar una parte de la superficie de la roca y dejar expuesto un fragmento de su interior para los análisis correspondientes. Este ha sido el objetivo número 38 y ha resultado ser un desafío muy difícil. La herramienta fue diseñada para moler roca marciana, pero Marquette Island no puede ser la última roca. Joanna Cohen, de Honeybee Robotics Spacecraft Mechanisms Corp., en Nueva York, empresa que construyó y opera la herramienta, informó que la operación ha sido enfocada en un margen conservador a fin de garantizar una durabilidad eficiente para los futuros hallazgos y trabajos que deba enfrentar Opportunity.
Opportunity lleva recorridos hasta el presente un 30% de la ruta de 20 kilómetros de extensión que inició a mediados de 2008, desde un cráter en el que pasó 2 años, teniendo como destino otro cráter denominado Endeavour. El vehículo viajó unos 5 kilómetros en 2009, más que en ningún otro año sobre Marte. Tras 2 meses de estudio, Opportunity abandonó la misteriosa roca el pasado 12 de enero aportándoles valiosa información a los expertos en Tierra que ya están obteniendo los primeros resultados del origen subterráneo de Marquette Island. Desde su aterrizaje en Marte en 2004, Opportunity ha hecho numerosos descubrimientos científicos, incluidas las pruebas de mineralogía que confirmaron por primera vez que Marte llegó a albergar agua en estado líquido. Después de trabajar 24 veces más de lo previsto, Opportunity ha recorrido más de 17 kilómetros y ha enviado a la Tierra más de 133.000 imágenes.