Algo que muchos consideran crítico para la definición de «Deep Web» es la ausencia de índices y motores de búsqueda. Sin embargo, eso no impide que algunos proyectos traten de ofrecer mecanismos específicos con el objetivo de localizar información entre todo ese caos digital. OnionCity se presenta como un portal sencillo, aunque inseguro, de búsqueda y acceso global para los sitios .onion de la red Tor.
La herramienta número uno para acceder a la red Tor no es otra más que el Tor Browser, navegador basado en Firefox y desarrollado por las mismas personas que mantienen activa a la red anónima. A decir verdad, el Tor Browser hace a todo el proceso muy sencillo, pero lo primero que demanda la red Tor, y la Deep Web en general, es conducta. El plan es reducir la huella, y no hacerla más grande con descargas masivas o servicios inseguros. Aún así, algunos usuarios están de acuerdo en que sería útil contar con una especie de índice anónimo. Una vez dentro de la red Tor, existen paradas dedicadas como la Hidden Wiki, pero hay personas que solamente quieren dar un vistazo rápido. Para ellas, existe OnionCity.
En su superficie, OnionCity es similar a cualquier otro buscador, aunque en realidad trabaja como un proxy Tor2Web, presentando el contenido de sitios ocultos .onion que hayan decidido «dejarse ver», con un leve cambio en su dominio (.onion.city). OnionCity fue presentado la semana pasada, y desde entonces ha registrado poco más de 650 mil sitios. OnionCity mantiene una actualización de caché relativamente agresiva, y en caso de que el portal original desaparezca, el buscador lo quitará de su índice en cuestión de días. Otro punto para destacar es que OnionCity se basa en una búsqueda personalizada de Google. Por lo tanto, si alguien quiere mantenerse fuera del alcance de OnionCity y otros buscadores, todo lo que tiene que hacer es agregar la exclusión robots.txt apropiada en su portal .onion, y arrojar un 403 hacia cualquier solicitud con el header «x-tor2web».
En otras palabras, lo mejor es interpretar a OnionCity como una ventana a la red Tor. Las ventanas nos dejan ver, pero no son necesariamente seguras. OnionCity ni siquiera ha implementado HTTPS en sus búsquedas, o sea que toda la información entre el usuario y el sitio .onion cacheado puede ser interceptada a gusto y placer. En el nombre de la conveniencia, OnionCity deja de lado algunas cuestiones de privacidad y anonimato que muchos tal vez prefieran conservar… ¿pero quién estaría lo suficientemente loco como para hacer algo ilegal con OnionCity?