Menu
in

Olympus OM-D E-M1 Mark II: Una gran mirrorless para paisajes y acción

60 FPS de Burst en tus manos

Olympus OM-D E-M1 Mark II

La serie OM-D de Olympus es una de las más reconocidas en el mundo fotográfico, y sobran razones para ello. Desde su excelente calidad de imagen y vídeo hasta su sólida construcción, estas cámaras semi-pro se ubican entre las mejores, y una especialmente atractiva es la Olympus OM-D E-M1 Mark II. Soberbio autoenfoque, estabilización de cinco ejes, un cuerpo sellado contra el clima y 60 FPS de Burst para las situaciones más extremas definen a esta mirrorless.

El espacio mirrorless nos llama de regreso, y al mismo tiempo nos recuerda que existen ofertas muy interesantes allí también. Por más que nuestro presupuesto oscile entre los 1.000 y 2.000 euros, eso no significa que debemos dejar de ser eficientes. La competencia es muy dura en este espacio, y no es demasiado difícil encontrar ejemplares de alto nivel como la Fujifilm X-H1, la Panasonic Lumix DC-GH5 y su impecable vídeo, o la Fujifilm X-T3.

Más allá de los (casi) tres años que lleva sobre los hombros y algunas limitaciones naturales del formato Micro Cuatro Tercios, lo cierto es que la Olympus OM-D E-M1 Mark II puede subir al ring y pelear varios rounds con todas ellas. El fabricante hizo un trabajo notable con esa actualización, mejorando los aspectos centrales del modelo anterior, sin ceder terreno en materia de controles manuales y calidad de construcción.


Olympus OM-D E-M1 Mark II: Alta velocidad, sin perder el enfoque

Un gran rendimiento, a un precio no tan loco

Lanzada en diciembre de 2016, la Olympus E-M1 Mark II presenta un sensor CMOS de 20.4 megapíxeles efectivos, y está acompañado por el procesador de imágenes TruePic VIII. Su sensibilidad ISO se extiende de 200 a 25.600 con un Boost hacia abajo de 64, mientras que la velocidad de obturación va de 1/8000 a 60 segundos, o 1/32000 con el sistema electrónico. Su pantalla LCD táctil mide 3 pulgadas, su resolución asciende a 1.037 millones de puntos, y es completamente articulada (90 y 270 grados). El viewfinder no se queda atrás, gracias a sus 2.36 millones de puntos, y cobertura del 100 por ciento.

La Olympus OM-D E-M1 Mark II transmite calidad desde el primer momento que la sostienes. El cuerpo se basa en una aleación de aluminio y magnesio, y su sellado de fábrica contra la humedad y el polvo ayuda a protegerla frente a los caprichos del clima. Técnicamente no es una cámara «pequeña», pero su formato general es muy cómodo, y no tendrás problemas mayores al disparar con la mano derecha.


Controles, controles…

El sistema de autoenfoque en la Olympus OM-D E-M1 Mark II es uno de los elementos más fuertes de toda la configuración, por no decir «el» más fuerte. Utiliza un total de 121 puntos con detección de fase, con cinco niveles diferentes para su modo continuo. Olympus recomienda comenzar tus sesiones con un valor neutro, pero si el sujeto a fotografiar es demasiado errático o quieres asignar una mayor prioridad, puedes hacer que el autoenfoque trabaje de forma más suelta o estricta. Además, no debes olvidar las actualizaciones de firmware (¡el último build 3.0 es de la semana pasada!), que incluyen varias optimizaciones para el autoenfoque.

Eso nos lleva al Burst. Si decides mantener el autoenfoque continuo activado, la Olympus OM-D E-M1 Mark II desarrolla unos 18 FPS, pero tienes la posibilidad de transformarla en una verdadera metralleta a 60 FPS. Los números finales dependen tanto de los modos de disparo como de la tarjeta de memoria utilizada (dos ranuras disponibles, pero sólo una es UHS-II), sin embargo, estoy convencido de que podrás capturar prácticamente lo que sea, desde animales y niños hasta deportes.


… ¡y más controles!

La interfaz de la Olympus OM-D E-M1 Mark II es una verdadera explosión de controles. Tres diales en la parte superior, botones dedicados para el modo de autoenfoque y el HDR, un botón Fn2 programable, otro botón Fn1 ideal para el pulgar derecho… y la historia se repite en la sección posterior. Si bien el dial de modo posee una función automática, la cámara pide a gritos que explores sus habilidades manualmente. En total, el dial de modo cuenta con diez entradas: Automático Inteligente «iAuto», Automático Programado «P», Prioridad de Apertura «A», Prioridad de Obturación «S», Manual «M», tres entradas para el usuario «C1-C2-C3», Filtros Artísticos «ART» (15 opciones disponibles), y el Modo de Vídeo. Los niveles de personalización son impresionantes, y por ello sugiero dedicar algunos minutos a las 200 páginas del manual oficial.


1-1250 f6.3 ISO 200
10s f8 ISO 200
25s f1.8 ISO 3200

La Olympus OM-D E-M1 Mark II fue la primera de esa casa en incorporar soporte de vídeo 4K, y después de todo este tiempo podemos decir que se mantiene a la par de sus rivales directas. Su 4Kp24 en formato DCI (4096 x 2160) alcanza los 237 megabits por segundo, y para ser sincero, creo que es el único modo a priorizar. Su 1080p con bitrate alto no es malo, pero no tiene un perfil de calidad tan superior. Algunos colegas recomiendan cubrir cualquier necesidad 1080p haciendo downsampling de 4K, salvo que el 1080p60 (52 Mbps) sea una condición obligatoria.

En lo que se refiere a conectividad, no hay mucho para decir. La Olympus OM-D E-M1 Mark II posee WiFi n integrado, pero no encontrarás Bluetooth, ni NFC. Por otro lado, sí cabe destacar el retiro de puertos micro y mini USB, en favor de un puerto USB tipo C.


[amazon box=”B07C5T1LD2″]


Accesorios para Olympus OM-D E-M1 Mark II

La situación actual de esta mirrorless en el mercado es bastante curiosa. He notado que algunos vendedores ofrecen sólo el cuerpo nuevo y sin batería por 1.200 euros, mientras que un kit completo, el cual incluye un muy interesante M.Zuiko 12-40, cruza la barrera de los 2.000 euros. En otras palabras, es posible aplicar diferentes combinaciones con el objetivo de optimizar nuestro presupuesto, y por qué no, sumar estos accesorios.


Trípodes y soportes

(121)
Trípode Profesional Gloxy GX-T6662A
  • Altura máxima de 1626 mm (columna central extendida)
  • Con una increíble capacidad de carga de 10 kg
  • Patas con 4 secciones y cierre de pestañas
  • Patas con goma antideslizante + puntas metálicas
  • Rótula con plato de liberación rápida
  • Nivel de burbuja integrado en la rótula
  • Rosca universal estándar 1/4"

Las especificaciones oficiales indican que el peso total de la Olympus OM-D E-M1 Mark II con batería y tarjeta de memoria llega a 572 gramos. Bastante pesada para una mirrorless, pero lejos de volverse incómoda. Aún así, no es mala idea adquirir un trípode para Olympus OM-D E-M1 Mark II, y el primero en nuestra lista es el clásico Gloxy GX-T6662A, con una carga máxima de 10 kilogramos, un diseño muy liviano hecho en aleación de aluminio, y patas con goma antideslizante. Nuestra segunda elección es el Clampod Takeway T2, mucho más compacta, pero no por eso menos robusta. Todo lo contrario: Esta segunda edición conserva la resistencia original, y mejora sus puntos de apoyo en modo trípode.


Bolsas y mochilas

El sellado contra el clima de la Olympus OM-D E-M1 Mark II es bienvenido desde todo punto de vista, pero estaríamos cometiendo un error muy serio si descuidamos su protección durante el transporte. Así llegamos a la mochila Gloxy Pro AW, con tres tamaños diferentes, interior acolchado y personalizable, un soporte para el trípode, y una funda impermeable externa. Ahora, si prefieres algo más «oficial», entonces no hay posibilidad de error con la bolsa Olympus CBG-8. Protege, es espaciosa, y pasa desapercibida, un detalle importante para muchos usuarios.

No parece una bolsa para fotografía…

Flashes

Tal y como podemos apreciar en las imágenes, la Olympus OM-D E-M1 Mark II no trae flash, pero nos ofrece una zapata a cambio. La duda aquí se reduce a qué estrategia seguir. ¿Algo compacto de uso casual, o un flash más «semi-pro» como la cámara? Sigamos los dos caminos: El Meike MK-320 pesa 150 gramos, entrega un número de guía 32 a ISO 100, y vale apenas 75 euros. En el otro carril, el Olympus FL-600R alcanza un número de guía 50 a ISO 200, y también funciona como luz LED para vídeo. Cuesta cinco veces más, pero funcionará bien con tu E-M1 Mark II.

Un poco de luz oficial para momentos oscuros…

Tarjetas de memoria

(1)
Memoria SDXC SanDisk 256GB Extreme Pro V30 U3 SDS
  • Tarjeta de memoria SanDisk Extreme Pro SDXC de 256 GB
  • Con velocidades de lectura de hasta 95 Mb/s
  • Permite grabar videos en Full HD y 4 k
  • A prueba de temperaturas extremas y daños externos

Que sobre y que no falte. El espacio de almacenamiento es vital en una cámara que graba vídeo 4K con semejante bitrate, pero además debe ser veloz en todas sus operaciones. Por ese motivo, nuestra recomendación de tarjetas se limita a la Transcend SDXC de 128 GB con 60 megabytes por segundo de escritura, y a la SanDisk SDXC Extreme Pro de 256 GB, con un rating V30 que garantiza un piso de 30 MB/s al momento de guardar vídeo.

El 4K de esta cámara necesita las mejores tarjetas

Objetivos

Si al final decidiste adquirir sólo el cuerpo de la Olympus OM-D E-M1 Mark II, necesitarás un buen objetivo que lo acompañe. Creo que lo más lógico es incorporar un comodín que se adapte a múltiples escenarios de un solo movimiento, y al perfil manual de la mirrorless. El Tamron 14-150mm f73.5-5.8 Di III marca ambas casillas a la vez. Desde gran angular hasta teleobjetivo, este pequeño cañón de la casa Tamron no te defraudará.

Un buen 14-150 para comenzar

Bandera a cuadros… por ahora. Estoy convencido de que la Olympus OM-D E-M1 Mark II será una gran compañera para ti, en especial si deseas fotografiar algunas escenas de acción, y su 4K DCI merece toda tu atención. Busca el mejor precio, y con un par de accesorios, estarás listo. ¡Buena suerte!


Escrito por Lisandro Pardo

Leave a Reply