Sí, lo que dice el título. No, no estoy bajo la influencia de ningún químico. Todos queremos que nuestros ordenadores funcionen bien, y que los errores sean cosa del pasado, pero hay ocasiones aisladas en las que necesitamos evaluar el comportamiento de un sistema y… hacerlo tropezar en cierto modo. Ahí es cuando aparece Not My Fault. Se trata de una herramienta oficial de Microsoft bajo su división Sysinternals, por lo tanto, el origen es seguro… aunque ya sabes lo que va a pasar si la usas.
Esperar lo mejor, y prepararse para lo peor. Expresión pesimista para algunos, pero razonable para otros. Vamos a aplicarla sobre el software. Todo desarrollador sabe que tarde o temprano su software experimentará un error, ya sea por un problema interno o un agente externo (factor humano, malware, etc.). Aunque parezca mentira, generar y reconocer errores es un buen entrenamiento, siempre y cuando se lleve a cabo bajo un entorno controlado. Ahora, traslademos eso a Windows.
Muchos de nuestros lectores tal vez piensen: «Windows no necesita ayuda para generar errores», y lamentablemente estarán en lo cierto, porque más allá de las apariencias, Windows es gigante, y muchos de sus componentes pueden fallar. Simular y estudiar sus errores nos «prepara para lo peor», reconociendo las sutilezas entre un inconveniente y otro, y analizando sus efectos.
Simulando
¿Acaso hay una herramienta para eso? La respuesta es sí, y se llama Not My Fault. Su creador es nada menos que Mark Russinovich, mente maestra detrás de la sección Sysinternals de Microsoft, quien también desarrolla otras joyas como el Autoruns, y el fabuloso Process Explorer. Not My Fault divide sus… funciones en tres categorías: Crash, Hang, y Leak.
- Crash – En esencia, las opciones bajo la pestaña deberían inducir pantallazos azules. Fallas de IRQL (ya sea en modo kernel o modo usuario), desbordamientos de búfer o de pila y errores «double free» son los que se destacan.
- Hang – Ofrece tres modos, uno que cuelga el sistema (error en DPC), y dos que hacen lo mismo sobre el programa (IRP y Deadlock).
- Leak – Genera fugas de memoria, paginada o sin paginar. Escoge el tamaño en kilobytes por segundo, y eso es todo.
Not My Fault tiene el potencial de robar una sonrisa o dos por el simple hecho de que somos nosotros los que causamos los errores, sin embargo, se los digo con toda sinceridad: No es un juguete, no lo usen en sistemas críticos, y por favor no hagan enojar a nadie. Tal vez algunos no encuentren razones válidas para la existencia de este software, pero está disponible sin cargo, y funciona con Windows Vista en adelante.