La Carrera Espacial dio lugar a una gran cantidad de experimentos más allá de los viajes orbitales y las misiones a la Luna. Uno de ellos fue el avión North American X-15, cuyo primer vuelo se llevó a cabo el 8 de junio de 1959. El X-15 realizó 199 vuelos oficiales durante sus nueve años de actividad, rompiendo múltiples récords en el proceso, incluyendo el de velocidad. ¿Qué tan rápido voló? De acuerdo a los registros disponibles, el X-15 destrozó la barrera de los 7.000 kilómetros por hora…
Cuando uno busca al avión más rápido del mundo en Internet, lo lógico es encontrar al SR-71 Blackbird. Efectivamente se trata del más veloz, siempre y cuando clasifiquemos los datos según la tecnología de vuelo utilizada. El SR-71 es un vehículo tripulado, y tiene tomas de aire, dos detalles que lo colocan como líder en su propia categoría. Ahora, si lo que queremos es al avión tripulado más rápido independientemente de su propulsión, la respuesta correcta es el North American X-15. Diseñado a partir de un concepto creado por Walter Dornberger (pieza crítica en el desarrollo del V-2, transferido a los Estados Unidos bajo la Operación Paperclip), el programa X-15 inició sus actividades el 8 de junio de 1959, y por las cabinas de sus tres prototipos pasaron pilotos de muy alto perfil, entre los que se destaca el mismísimo Neil Armstrong, con siete vuelos entre 1960 y 1962.
Al igual que sucedió con otros vehículos de la llamada Serie-X, el X-15 no podía despegar por su cuenta, y debía ser elevado a una altitud promedio de 13.7 kilómetros con la ayuda de un B-52 modificado. En otras palabras, el X-15 fue disparado como un misil en todas sus misiones. Los registros oficiales reportan un total de 199 vuelos entre junio de 1959 y el 24 de octubre de 1968. Solamente dos vuelos (90 y 91 de la lista general) superaron la línea Kármán, ambos con Joseph A. Walker en la cabina. El primero fue el 19 de julio de 1963, con una altitud confirmada de 105.9 kilómetros, y el segundo se llevó a cabo el 22 de agosto de ese mismo año, con 107.8 kilómetros en el indicador.
Los vuelos más veloces del X-15 superaron con comodidad la marca de los 6.000 kilómetros por hora, sin embargo, hubo dos ocasiones en las que fue llevado a sus límites más extremos, ambas con William J. Knight como piloto. El Vuelo 175 del 18 de noviembre de 1966 alcanzó los 6.840 kilómetros por hora, mientras que el Vuelo 188 del 3 de octubre de 1967 grabó a fuego el récord absoluto de 7.274 kilómetros por hora. Ningún avión tripulado ha desafiado ese número en los últimos 50 años, y si tenemos en cuenta el pobre interés actual en el desarrollo de vuelos supersónicos, lo más probable es que nada cambie por un largo tiempo.