En más de una ocasión se especuló con la posibilidad de que Nintendo iniciara el desarrollo de nuevos títulos basados en su propiedad intelectual, orientados a dispositivos móviles. Durante el día de ayer, esa posibilidad se convirtió en un hecho. El gigante responsable por Mario, Zelda y Metroid unirá fuerzas con la compañía japonesa DeNA, y los juegos que salgan de esta alianza actuarán de manera «complementaria» a lo que Nintendo ya ofrece en el mercado.
Se aproximan tiempos de cambio para Nintendo. A pesar de éxitos específicos como Mario Kart 8, las figuras Amiibo y la saga Pokémon, el gigante japonés debe recuperar el terreno perdido a manos a sus competidores y evadir de una vez por todas la plaga de números rojos. Aún con varios tropiezos acumulados, nadie niega que la compañía posee franquicias muy populares y poderosas en lo económico. Desde que tenemos memoria, Nintendo ha rechazado sistemáticamente la posibilidad de ver a sus figuras mayores fuera de hardware «nativo», una decisión comprensible desde cierto punto de vista, pero que ata a todos los juegos bajo su desarrollo al rendimiento de cada plataforma. Lamentablemente, Nintendo alcanzó un punto en el que ese rechazo causa más problemas de los que soluciona, y si en verdad ve al crecimiento como una de sus prioridades, deberá abrir algunas fronteras.
Eso es exactamente lo que sucedió ayer, cuando a través de un comunicado oficial confirmó una nueva alianza con DeNA, uno de los proveedores de soluciones móviles más grandes de todo Japón. El término técnico habla de «alianza de negocios y capital», la cual incluye el desarrollo de nuevos juegos destinados a smartphones y tablets. La clave aquí es que los productos derivados de esta alianza adoptarán un perfil complementario frente a los juegos que Nintendo vende por su cuenta. ¿Qué quiere decir esto? En esencia, no habrá ports. Nintendo dijo que la nueva línea de desarrollo estará limitada a «juegos originales optimizados» para dispositivos móviles, y fue el propio presidente Satoru Iwata quien agregó que «no hay ninguna intención» de llevar títulos existentes a hardware externo.
En lo personal, creo que el anuncio entero caería muerto después de esas palabras, si no fuera por dos aspectos más. Por un lado, la alianza entre Nintendo y DeMA creará un nuevo servicio de suscripción compatible no sólo con las consolas de Nintendo y dispositivos móviles, sino también con PCs, a lo que muchos ven como el heredero del sistema Club Nintendo que desaparecerá en julio. Todavía se desconocen los beneficios efectivos de ese futuro servicio, pero estarán estrechamente vinculados a una nueva consola, a la que sólo se conoce como NX. Todo lo que se logró exprimir de Nintendo sobre NX es que se trata de un nuevo sistema de hardware con un nuevo concepto aplicado, clásica «no declaración» que pone a los consumidores de los pelos. Al mismo tiempo, la compañía aseguró que no habrá noticias de NX hasta 2016. Admito que la llegada de Nintendo a los dispositivos móviles es un buen cambio, pero la falta de información demuestra que las viejas costumbres no se olvidan fácilmente.