Nikon se había mantenido afuera del mercado de sensores de “cuadro completo”, hasta hace poco, cuando desembarcó en este marcado con su tope de línea, la Nikon D3. Ahora extiende el rango de cámaras con sensores de este tamaño con su D700, hermana de la D300 y casi igual a esta excepto por el tamaño del sensor.
La nueva cámara de Nikon es, externamente, casi igual a su hermana menor (la D300), mientras que “bajo el capó” es prácticamente igual a su hermana mayor, la (D3). Este compromiso entre ambas también se ve en el precio, el cual es aproximadamente la mitad de la D3 y el doble de la D300.
La D700 cuenta con 12 Megapíxeles, un visor óptico mejorado, capacidad para 5 cuadros por segundo (8 con un pack de baterías), el fantástico sensor de su hermana mayor (igual en tamaño a la película de 35mm) y básicamente todo lo demás que trae la D3 además de un sistema para limpiar la suciedad del sensor y el obturador (algo menos robusto) de la D300. En la práctica, esto significa que esta cámara es una D3 algo más portátil pero casi sin compromisos en lo que a calidad se refiere.
Esta cámara podría compararse con la Canon 5D o su eventual reemplazo, ya que es algo intermedio entre las Reflex digitales “para empezar” y las “tope de línea”. Un compromiso entre calidad / precio y peso / volumen que favorece quienes tienen que moverse o prefieren las fotos en el campo a las producciones de estudio.
La nueva Nikon estaría a la venta desde el 25 de Julio a un precio guía de 2599€