Need for Speed se ha visto de varias maneras y se ha jugado de muchas otras, pero lo que siempre se mantuvo igual fue su éxito… bueno, hasta estos últimos años por lo menos. El último título, Undercover, no solo fue el peor de la franquicia, sino que también fue el peor recibido. Estos últimos resultados obligaron a Electronics Arts a tomar una ruta completamente diferente. Ahora, Need for Speed: Shift, el nuevo título de la serie toma una dirección más realista, pero aunque parezca un simulador, sigue siendo bastante accesible.
La serie Need for Speed ha tenido mejores momentos. En un tiempo fue líder en el mercado y muchos trataron de imitar su accesible nivel de dificultad y variedad de presentaciones y estilos. Sin embargo, el viejo truco de un mundo abierto donde puedes hacer carreras y eres perseguido por la policía empezó a aburrir al tercer título identico al anterior. Finalmente, llegó Undercover y fue la gota que rebalsó el vaso. El título no solo era idéntico a los anteriores, sino que se veía peor y jugaba muchísimo peor. Eso resultó en un cambio de dirección completo.
Con Need for Speed: Shift, Electronics Arts intenta apuntar a otra demográfica, similar a una que disfrutaría de juegos como Race Driver: GRID, más que el típico juego de la serie. Este nuevo título, aunque no un simulador, es lo más cercano que ha estado en su historia y, por primera vez, parece un cambio que puede beneficiarle. Aunque el coche perdona mucho de los golpes, el equipo a cargo del desarrollo fue por una experiencia realista, más que un "simulador" hecho y derecho.
Puede que al principio no nos haya enamorado del todo, pero cuando GRID presentó por primera vez el modo para volver atrás en el tiempo, abrió una nueva opción que todos los juegos de carrera deberían adoptar como algo opcional por lo menos y Shift siente la falta de esta opción. Más que nada porque los controles no ayudan a recuperarse de un trompo o una curva mal hecha y la inteligencia artificial no parece tener mucho problema en destruir sus coches contra el tuyo. Esto, por supuesto, puede volverse extremadamente frustrante en ocasiones.
Gráficamente es un gran salto de lo último que vimos en Undercover y en cada imagen que vemos no podemos evitar compararlo con el anterior título de Codemaster, antes de Dirt 2. Las cabinas son muy detalladas con todo tipo de agujas dinámicas que muestran información en tiempo real, lo que puede ser muy agradable para fanáticos del deporte. Por el resto de la cosas, se ve como se ven los juegos de carrera hoy en día. Nada nuevo bajo el sol.
Actualmente puedes conseguir Need for Speed: Shift para varias plataformas. Las versiones de PlayStation 3 y Xbox 360 se puede conseguir por €65.90, mientras que las PC se encuentra por €44.90 y, finalmente, la de PSP por €36.95. Mientras que el modo carrera puede ofrecerte varias horas de juego, en línea también encontrarás una gran cantidad de opciones, como carreras con hasta ocho coches. Como este también existen modos más variados.
Need for Speed: Shift definitivamente no es un mal juego. Todo lo contrario, parece ser la dirección correcta para la serie, pero va necesitar un poco de trabajo. Shift muestra una total falta de identidad y, las pocas cosas que tienen de originales no son lo suficiente fuertes como para hacerlo sentir fresco. Mientras que puedes pasar buenos ratos con este título, hay varios que recomendaríamos antes que él, aún el ya viejo GRID o el próximo Forza MotorSport 3 que viene con mucha promesa.
Puntaje: 78%
Conclusión: Una nueva y mejor dirección para la serie Need for Speed, pero todavía le falta mucho trabajo para diferenciarse de la competencia.