La Web del pasado era una criatura completamente diferente. En la actualidad hemos llegado a sospechar su contenido es producido por bots, pero ayer podíamos encontrar cosas como fanpages para colecciones de cristalería, álbumes de vacaciones en línea, toda clase de proto-wikis dedicadas a múltiples temas, y mucho, pero mucho HTML parpadeando. El buscador Wiby te lleva de regreso a esa Web en un solo clic, y estoy seguro de que pasarás un largo rato allí…
Tal y como dijo cierto león parlante en una vieja película, algunos estuvimos allí cuando la magia fue escrita. La Web era un lugar nuevo y extraño, fácil y difícil de navegar a la vez, con diseños simples que obedecían a un ancho de banda muy limitado, y a costos extremos en cada sesión. Nuestra rutina era vivir y morir por la tarifa plana, o vender nuestras almas en el cibercafé más cercano.
Ahora, la Web cambia a la velocidad del rayo, y gran parte de su antiguo contenido ha desaparecido, o quedó tapado por proyectos ultra-comerciales que reciben toda la atención de los buscadores modernos. Por suerte existen recursos como el Internet Archive que guarda backups de millones de portales, sin embargo, tenemos otra alternativa bajo la forma de Wiby, un buscador con dos objetivos: Servir como puerta de acceso a la «vieja Web», y ayudar a ordenadores más antiguos a seguir navegando.
Cómo acceder a páginas Web clásicas con Wiby
Como buscador general, lo cierto es que no hay demasiado para destacar sobre Wiby: Los resultados que presenta son simples (y en ocasiones no tan precisos), mientras que los sitios siguen una línea similar, priorizando el texto y las páginas de bajos recursos para una carga más veloz. Si tienes un ordenador antiguo con un navegador que perdió soporte o no incluye las últimas tecnologías, los resultados de Wiby deberían funcionar bien.
Pero el potencial de Wiby se multiplica al hacer clic en la opción Surprise Me. Uno de los placeres primordiales en la vieja Web era el descubrimiento: Nadie sabía con seguridad en qué sitio iba a terminar. El «Me siento con suerte» de Google es un chiste de mal gusto en estos días, pero con Wiby, cada clic es legítimamente una sorpresa. Viejas galerías con fotos de bases militares, una fanpage para las radios «Superadio» de General Electric, páginas más conocidas como Doom2.net, un «diccionario de demonios» en alemán, sitios personales que quedaron congelados en el tiempo… y más. Prepárate a perder mucho tiempo con Wiby, el que avisa no traiciona.
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