Menu
in

NASA: En el espacio beberás tu orina

¿Qué niño no ha pasado parte de su infancia soñando con ser astronauta? Es muy posible que se trate de una de las fantasías infantiles más comunes. Sin embargo, esto podría cambiar en el futuro. Water Recovery System es un sistema que permitirá a los astronautas beber su propia orina, evitando transportar al espacio miles de litros del preciado líquido. ¿Todavía sigues queriendo ser astronauta?

Muchas culturas beben su orina como parte de oscuros rituales o debido a algunas (generalmente falsas) creencias que le atribuyen propiedades curativas, incluso milagrosas. Pero la mayor parte de la gente que está en su sano juicio se negaría rotundamente a beber orina. Y más si ni siquiera es tu propia orina. Sin embargo, los astronautas deberán hacerlo.

Poner en órbita un kilogramo de carga útil es caro. El combustible necesario para hacerlo cuesta dinero. Cada gramo transportado al espacio debe ser aprobado por toda una serie de burócratas que controlan que el costo de cada lanzamiento no se vaya a las nubes (irónicamente). El objetivo de las misiones espaciales es, en general, transportar satélites o experimentos que de alguna manera devuelven en forma de ganancias la inversión requerida para transportarla. Pero los humanos que van acompañando esa carga no son “rentables”, convirtiéndose en un peso muerto que hay que llevar y traer al espacio. Además, tenemos la molesta costumbre de comer y beber todo el tiempo, así que también hay que transportar muchos kilogramos de agua y alimentos. Enviar un litro de agua al espacio puede costar tanto como 20.000 euros. Imagina lo que cuesta dar de beber a los astronautas de la Estación Espacial Internacional durante los meses que duran sus misiones.

Por lo tanto, los astronautas tienen que reciclar el agua. Esto incluye el agua que se evapora al ducharse, la que se descarta luego de afeitarse o cepillarse los dientes, e incluso sudor y el vapor de agua que se acumula dentro de los trajes espaciales. Incluso se aprovecha el agua de las pilas de combustible que proporcionan energía eléctrica a la lanzadera espacial.  Pero hasta ahora la NASA no había intentado aprovechar una importante fuente de agua: la orina.

La ultima misión del transbordador espacial de Endeavor, que despegó el 14 de noviembre desde el Centro Espacial Kennedy y que se acopló con la Estación Espacial Internacional, llevaba a bordo un dispositivo llamado Water Recovery System que permite aprovechar cada gota de orina, convirtiéndola en agua potable destinada al consumo comunitario de los tripulantes. "Hicimos pruebas para probar el agua con los ojos cerrados", comentó el principal ingeniero a cargo del sistema, Bob Bagdigian. "Nadie tuvo grandes objeciones. Además de un débil sabor a yodo, es tan refrescante como cualquier otro tipo de agua", añadió.  

Los responsables del invento son un grupo de investigadores de la Universidad Tecnológica de Michigan, quienes aseguran que el producto obtenido con su planta potabilizadora es tan pura que rivaliza con el agua del manantial más limpio de la Tierra. El artefacto comenzó a ser desarrollado en 1993, por lo que se supone que se han efectuado todas las pruebas y análisis imaginables. Decenas de voluntarios deben haber bebido cientos de litros de “agua semipura” (u orina adulterada, depende de cómo quieras verlo) antes de obtener resultados más o menos decentes.

Ahora ya lo sabes. No solo Papa Noel y los Reyes Magos no existen, si no que además los astronautas beben pis. Cuando sea grande, quiero ser carpintero.

Escrito por Ariel Palazzesi

Leave a Reply