El organismo ha lanzado un plan para combatir con este problema creciente
Las Naciones Unidas han lanzado un plan en cooperación con Ericsson, Microsoft, Dell y Hewlett-Packard para intentar poner fin al creciente y amenazante problema de la basura electrónica.
El progreso trae aparejado un altísimo incremento en la demanda de dispositivos electrónicos, desde ordenadores a móviles y reproductores mp3. Y si bien los países de occidente han sido generalmente los mayores generadores de basura electrónica, las florecientes economías de China y la India están convirtiendo a sus poblaciones en grandes generadores de e-basura.
Según estadísticas este tipo de basura llegará en poco tiempo a superar los 40 millones de toneladas, creciendo año a año al triple del ritmo de los otros tipos de basura, algo que requiere de una rápida acción. Y esa acción toma forma con el nombre de Solving the E-Waste Problem (StEP).
StEP ayudará a los gobiernos de todo el mundo a generar políticas para el tratamiento adecuado de la e-basura, a la vez que instruirá a quienes la manejen para intentar minimizar la contaminación que generan. Las empresas que participan del proyecto cargarán con todos los costos de recolección de la e-basura, lo que sin dudas ayudará a que busquen mejorar el diseño de sus productos.