Lisandro Pardo
El Gran Hermano continúa clavando sus garras sobre todo servicio que busca ofrecer alguna forma de privacidad al usuario común. Después de que varios nombres han mordido el polvo en los últimos días, MyKolab, uno de los servicios que recomendamos como alternativa a Lavabit, ahora ofrece una versión “lite” con acceso a una simple cuenta de correo electrónico, a precio reducido.
Ya no queda mucho más para decir sobre la actitud que han demostrado las autoridades desde que el “spygate” voló por los aires. Detenciones abusivas hechas al límite de la ley, destrucción injustificada de propiedad, condenas de varias décadas a quienes filtran información, y hasta el bloqueo ilegal a primeros mandatarios son algunas de las herramientas que los halcones de la vigilancia están dispuestos a usar, sin importar las leyes que doblen o rompan en el proceso. Y el efecto dominó se está sintiendo sin atenuantes. Lavabit cayó el 8 de agosto. Silent Circle suspendió su servicio de correo electrónico un día después. Y el pasado martes Pamela Jones, la creadora del portal de noticias legales Groklaw, anunció el cierre del sitio debido a que ya no existe ninguna clase de escudo que lo proteja de una exposición forzada. Todos aquellos que quisieran colaborar con Groklaw, podrían quedar expuestos. La única vía de contacto que dejó Jones en su entrada final, es su dirección de correo en MyKolab. Y al igual que sucedió con Lavabit, todas las cabezas están girando hacia ese servicio.
En un intento por responder a esta nueva ola de interés y de adaptarse a las necesidades de miles de potenciales usuarios, MyKolab decidió lanzar una versión reducida de acceso a su plataforma de correo electrónico, sin las funciones adicionales de “groupware” por las que MyKolab es conocido. En resumen, se trata de una cuenta de correo con acceso vía webmail y 1 GB de capacidad. De acuerdo a las opciones que se escojan, MyKolab puede llegar a ser un servicio relativamente costoso, pero esta versión “lite” solamente demanda una cuota de 4,05 euros por mes, con un mínimo descuento en caso de realizar el pago anual por anticipado. MyKolab está bajo jurisdicción suiza, por lo que debería mantenerse a salvo de cualquier amenaza directa, pero la pregunta queda instalada: ¿Es hora de pagar por privacidad?
