La informática nos ha ayudado a simplificar infinidad de tareas. No solamente estamos hablando de simples operaciones matemáticas, sino que también se ha alcanzado un nivel de desarrollo superlativo en campos mucho más complejos, entre los cuales podemos mencionar al dibujo y la animación. Por supuesto, la música no ha quedado aislada de este avance, aunque las herramientas necesarias para realizar composiciones y notaciones musicales suelen ser propietarias, además de caras. MuseScore se presenta como una alternativa viable frente a otras soluciones comerciales, en las que podrás anotar, componer, editar y corregir tu música, sin gastar un solo centavo.
Las herramientas que pueden ser utilizadas en un ordenador también han tenido su cuota de evolución. Sólo basta con darle un vistazo a nuestra reciente galería de software antiguo y compararla con los programas actuales que utilizamos todos los días. Algunos podrán considerar a la planilla de cálculo como una simple herramienta, pero su utilidad es innegable para millones de usuarios. Algo similar podemos decir de aspectos como el dibujo o la animación. Un arquitecto o ingeniero debía estar luchando horas frente a una lámina, la cual hoy puede hacer gracias a herramientas como AutoCAD en una fracción del tiempo. Lo mismo podemos decir de la animación: Las miniaturas y los micro-movimientos han pasado al olvido desde que los realistas entornos 3D nos han tomado por asalto. ¿Y qué hay de la música? Ejemplos de música electrónica hay muchos, es verdad, pero nos referimos a cosas más elementales, como la composición y la notación, además de la mezcla y la aplicación de efectos.
Hay muchos programas para escribir música. Entre las opciones comerciales más conocidas, algunos usuarios colocarán a Sibelius o Finale un escalón por encima del resto. Claro que, no son aplicaciones para cualquiera: Finale cuesta aproximadamente 460 €, mientras que la versión educativa de Sibelius no baja de los 230 €. Para cualquier entusiasta de la música con un teclado MIDI en su regazo, dichas sumas pueden resultar demasiado saladas, pero puede recurrir a alternativas gratuitas como MuseScore. En realidad, MuseScore es una evolución de MusE, un secuenciador MIDI disponible para Linux, pero MuseScore va mucho más allá. Está disponible en Windows, OS X y Linux, puede importar y exportar tanto archivos MIDI estándar como el formato MusicXML, también puede exportar las notaciones en formato PDF o PNG, y soporta ingreso de notas con ratón, teclado de ordenador, y teclado MIDI. La página oficial ofrece un rápido tutorial basado en diez cortos vídeos que enseñan las principales virtudes de MuseScore, junto con algunos detalles de su funcionamiento.
La descarga del instalador representa poco más de 27 megabytes, y una vez instalado, su necesidad de ajustes adicionales es prácticamente nula. Personalmente no soy una persona demasiado aficionada a la música, pero las ventajas técnicas y económicas que ofrece MuseScore son evidentes, respaldadas por una creciente tasa de adopción. Si te gusta la música, puedes leerla, escribirla, e incluso crearla, no deberías dejar pasar a un software como MuseScore. Es lógico pensar que se pierde parte del encanto al ingresar notas con el ratón, pero si tienes en tu poder un teclado MIDI, ver fluír las notas en la pantalla de seguro generará una sensación muy agradable.