Evaluar distros Linux con la ayuda de su modo live directamente desde un pendrive es algo muy cómodo y conveniente, pero en la mayoría de los casos terminamos dedicando todo el espacio disponible a una sola distro. Dicho eso, ¿por qué no integrar varios sistemas operativos en el mismo pendrive? El programa para lograrlo es MultiBootUSB.
Las ventajas del modo live USB en las distros Linux son muy importantes. En primer lugar, el usuario logra comprobar el nivel de compatibilidad que posee el sistema operativo sobre el hardware disponible. Después puede estudiar los detalles más relevantes de la interfaz, al igual que sus limitaciones. Lo mismo se extiende al paquete de programas preinstalado, y a qué tan fácil resulta modificar ese contenido.
Sin embargo, no tiene mucho sentido dedicar un pendrive entero a una sola distro. El mercado ya ofrece unidades con una capacidad escalofriante, y cuando estudiamos el tamaño promedio de las imágenes con mayor popularidad en el mundo Linux, lo cierto es que apenas superan el gigabyte. Así llegamos a la pregunta de fondo: ¿Qué nos impide instalar más de una distro Linux en un único pendrive? La respuesta es nada.
Cómo instalar varias distros de Linux en una memoria USB
Todo comienza descargando una copia de MultiBootUSB. La herramienta es compatible con Windows y Linux (ya sean paquetes DEB o RPM), y una vez instalada, la tarea se divide en tres pasos.
- Primero insertamos un pendrive y esperamos a que el sistema operativo lo detecte. MultiBootUSB trabaja con varios formatos, pero por cuestiones de soporte extendido se recomienda usar FAT32, a menos que el ISO sea mayor a 4 GB.
- El segundo paso implica localizar y escoger la imagen ISO a procesar haciendo clic en el botón Browse ISO.
- Finalmente, hacemos otro clic en el botón Create (el parámetro de persistencia puede quedar en 0).
Otra opción dentro de MultiBootUSB es evaluar las distros Linux a través de un entorno QEMU. En esencia, lo que hace es «bootear» las imágenes ISO o un pendrive sin necesidad de reiniciar el ordenador. De más está decirlo, QEMU carga con algunas penalidades en cuanto a rendimiento, y la versión para Linux requiere configuración adicional, pero es bueno saber que existe algo así.