Desde hace ya varios meses es posible encontrar diferentes productos que poseen un ordenador entero en el volumen de un pendrive o un dongle HDMI. Si la miniaturización ha alcanzado este punto, ¿por qué no colocar ordenadores en el interior de otros accesorios? Eso es exactamente lo que busca Mouse-Box, un concepto que fusiona al ordenador con un ratón.
Un ordenador en el interior de un teclado es una de las ideas más viejas que hemos visto en el mundo de la informática. Todos los sistemas hogareños de antaño adoptaron ese formato, el cual nos acompañó durante décadas. El paso del tiempo sumado a varios saltos evolutivos en materia de hardware provocó que los ordenadores integrados limitaran su presencia a mercados muy específicos, pero gracias a las últimas optimizaciones en miniaturización y consumo de energía, estamos viendo algunas ideas muy interesantes. No hay que ir muy lejos en los buscadores para encontrar proyectos que tomaron a un Raspberry Pi y lo colocaron dentro de un teclado. También han aparecido diferentes dongles con conectores HDMI que hacen uso de los televisores actuales. Y ahora, llega Mouse-Box, un concepto de ordenador integrado a un ratón.
Este desarrollo polaco busca crear un sistema con un SoC ARM quad-core a 1.4 GHz, 128 gigabytes de almacenamiento Flash, dos puertos USB 3.0, WiFi n, un puerto micro HDMI para conectarlo a un monitor, acelerómetro, giroscopio, y una batería como elemento opcional. En caso de que haya una batería, el Mouse-Box podría estar acompañado por un mousepad especial que restaura su carga vía inducción a medida que lo usamos. El hecho de recurrir a un SoC ARM obviamente limita su compatibilidad a plataformas Linux, pero estamos ante un concepto, y la configuración final del hardware puede cambiar sin previo aviso (lo que vemos como placa base es una simple referencia visual, nada más).
En esencia, lo que deben evitar los creadores del Mouse-Box es que salga más de un cable del ratón. El puerto micro HDMI debería encargarse tanto del audio como del vídeo, y a la hora de conectar un teclado, un simple sensor inalámbrico presente en uno de los puertos USB frontales debería ser suficiente para que funcione. Aún así, hay mucho de especulación en esto. Aparentemente, Mouse-Box está buscando socios que lo ayuden a llegar al mercado, y tampoco podemos descartar la posibilidad del crowdfunding.
