Matias Benítez
La primera entrega de la serie de aventuras gráficas más famosa y querida de todos los tiempos está de fiesta. Monkey Island cumplió 25 años y lo celebramos repasando la primera aventura de Guybrush Threepwood con datos anecdóticos acerca del juego.
Lanzado en 1990 para Amiga, MS-DOS, Atari ST y Macintosh, The Secret of Monkey Island nos introdujo a la era dorada de los piratas. El juego comienza con el personaje principal, Guybrush Threepwood, un joven que sueña con convertirse en un pirata. Para ello emprende un viaje hacia una isla caribeña llamada Mêlée Island donde debe atravesar por terribles pruebas como vencer a Carla, la maestra de esgrima, por medio de insultos, encontrar un tesoro enterrado, y robar una estatua de la mansión de la Gobernadora, Elaine Marley, una atractiva mujer de la cual termina enamorándose.
El juego fue concebido en 1988 por un empleado de Lucasfilm, Ron Gilbert, quien lo diseñó junto con Tim Schafer y Dave Grossman. The Secret of Monkey Island se convirtió en un éxito gracias a su humor y jugabilidad, dando lugar a una serie de secuelas. Incluso en 2009 LucasArts lanzó una remake tanto en PC como en consolas y dispositivos iOS bajo una estética completamente rediseñada en alta definición donde se añadieron voces a todos los personajes y líneas de diálogo, adornando además con efectos de sonido ambientales a los diferentes escenarios.
A principios de septiembre Monkey Island cumplió 25 años, y el diseñador Ron Gilbert utilizó su blog para compartir algunas historias realmente interesantes sobre el desarrollo del juego. Empezando por una muy particular sobre la fecha de lanzamiento ya que, según palabras de Gilbert, es difícil saber cuándo apareció por primera vez The Secret of Monkey Island en las tiendas. Podría haber sido a fines de septiembre o principio de octubre. Recordemos también que el formato en aquella época era en disquete y los métodos de testeos requerían que Gilbert y otros empleados estuvieran horas copiando los archivos del juego para que los encargados pudieran buscar errores.
Otro dato anecdótico eran los envíos del juego destinados para producirse en Europa. Teniendo en cuenta que un envío por correo tardaba demasiado tiempo, el equipo se dirigía hacia el aeropuerto y mendigaban pasajeros al azar con rumbo a Europa para que llevaran los disquetes por ellos. Algo muy loco sin dudas. Pero así y todo el juego pudo salir a la luz dando inicio a la saga Monkey Island, considerado por muchos como una de las más grandes aventuras gráficas de la historia. Y para celebrarlo, nada mejor que volver a disfrutar de las aventuras del amigo Guybrush. Mira detrás de ti, ¡un mono con tres cabezas!
