El gigante de Redmond debió enfrentar un dilema bastante grande. Después de lo que fue una primera generación muy pobre, el segundo modelo de tablets Surface le indicó que aún había problemas por resolver, pero que también se encontraba en el camino correcto. La nueva Surface Pro 3 llega con el enorme objetivo de fusionar definitivamente a la tablet con el ordenador portátil. ¿Podrá?
Si nos limitamos a hablar sobre adopción, lo cierto es que no hay nada para discutir. La presencia de Apple y el hardware basado en Android sobre el mundo de las tablets es contundente. Desde las mini-tablets que son grandes como un smartphone hasta modelos que apenas se pueden llevar bajo el brazo, no quedan dudas de que la guerra de formatos es implacable. Pero si existe un dato que nos llamó mucho la atención durante la presentación oficial de la nueva tablet Surface Pro 3, es este: El 96 por ciento de los usuarios de iPad también tiene un ordenador portátil. Esto surge simplemente gracias a la definición de roles. En más de una ocasión me han querido comer el hígado por decirlo, pero la tablet es un dispositivo de consumo, mientras que la productividad requiere un formato más flexible. Obtener lo mejor de ambos mundos ha sido la misión principal de la enorme cantidad de modelos híbridos que salieron al mercado, y con una mano en el corazón, ninguno de ellos hizo un buen trabajo. Bueno, Microsoft necesitó de tres generaciones para pulir su visión, y de acuerdo a sus propias palabras, la Surface Pro 3 es la tablet que reemplazará a la laptop. Veamos cuánta verdad hay en eso.
El tridente básico de ataque está compuesto por una pantalla táctil de 12 pulgadas (2.160 por 1.440 píxeles), un lápiz digitalizador, y un soporte de posición múltiple (de 22 a 150 grados) que se adapta a cada modo de uso. Microsoft no sólo ha incrementado el tamaño de la pantalla (con 12 pulgadas, se busca aumentar la productividad en tareas más complejas), sino que también redujo el espesor de la tablet a 9.1 milímetros, ganando aún más rendimiento frente a la Surface Pro 2. Su peso sin teclado está en el orden de los 800 gramos, y la demostración en vivo la hace más liviana que una Macbook Air de 13 pulgadas (si los cálculos no me fallan, hay medio kilogramo de diferencia). A pesar del notable aumento en la eficiencia energética del hardware (hasta nueve horas de batería), la Surface Pro 3 todavía requiere de refrigeración activa, un claro recordatorio de que es “más ordenador que tablet” a través de sus componentes. Microsoft hizo un gran énfasis en la capacidad de ingresar datos a mano alzada sobre la Surface Pro 3, pero no se ha olvidado de los teclados. Sobre el escenario, el presentador hizo una especie de “mea culpa”, admitiendo que el trackpad en la generación anterior fue bastante malo. El nuevo Type Cover aumenta el tamaño del trackpad en un 68 por ciento, y reduce la fricción en casi un 80 por ciento. En lo personal, aún tengo mis dudas sobre la calidad del tipeado en el Type Cover, pero pronto tendremos más detalles.
La tablet Surface Pro 3 estará disponible con procesadores Core i3, i5 e i7 de Intel, y su punto de partida será de 799 dólares. A modo de comparación, la edición Core i5, que trae 8 GB de RAM y un SSD de 256 gigabytes, salta a 1.299 dólares (siempre sin Type Cover, 130 dólares por separado). La combinación entre especificaciones y precio vuelve a colocar presión tanto sobre la Macbook Air como sobre las variantes de Ultrabooks disponibles. Ahora, la pregunta es: ¿Qué pasó con el modelo “no Pro”? Varios sitios colegas apostaron a que Microsoft presentaría una versión más económica de la Surface, con un SoC Qualcomm y pantalla de ocho pulgadas. Se han barajado varias teorías para justificar la demora, siendo la primera de ellas el software. Las versiones RT de Windows aún necesitan de mucho trabajo, y Redmond debe evitar quemarse (otra vez) con problemas de funcionalidad y compatibilidad. En lo personal, no creo que Microsoft haya alcanzado al híbrido perfecto, pero la Surface Pro 3 parece tener una brújula sólida. Ahora, hay que ver si el consumidor responde.
6 Comments
Leave a Reply