Pero mira que le gustan los billetes a Microsoft. Como empresa es su obligación ganarlos, lo sabemos, pero el modelo que propone mediante patente no lo tiene del todo claro ni el propio creador. Su sistema se basa en subscripciones a ordenadores estándar donde el usuario pagará por el tiempo que emplea el software instalado. Se está pensando si lanzarlo al mercado o dejarlo pasar. Y no me extraña.
La patente 20080319910 no deja lugar a dudas. No es por chivarme, pero Microsoft ha sido la responsable de este registro en la oficina de patentes de los EEUU. Y si nos paramos con detenimiento a leer los párrafos que expone nos encontramos con un sistema de pago por uso que consiste en facturar el tiempo que se utilice un ordenador estándar. Esta es una estrategia de comercialización diferente a la actual, en la que el usuario abona el importe al inicio, pero Microsoft plantea un pago por uso asemejando a un alquiler de equipo. Propone vender "modelos estándar" de PCs a un descuento significativo, con el resto del precio subsidiado por una parte no especificada de la cadena de suministro. El costo real sería cambiado a un contrato de uso, determinando por cuánto tiempo una persona tendría que utilizar su computadora.
El caso es cobrar hasta por estornudar, aunque Microsoft se empeña en que, si bien el sistema puede parecer más caro que el tradicional, sostiene que ofrecería una mayor "vida útil" haciendo posible el acceso a hardware de alta gama de una forma barata. Las ventajas que detalla Microsoft en su solicitud de patente estriban en: “Un rendimiento escalable a nivel de componentes, de software y opciones de servicio, teniendo una interfaz de usuario que permite seleccionar los niveles de rendimiento.” También afirma que: “El nivel de rendimiento escalable de componentes puede incluir desde un procesador, memoria, hasta una tarjeta gráfica. El software y servicios escalables pueden incluir el tratamiento de textos, correo electrónico, navegación, acceso a bases de datos, etc.” Los compradores pueden alternativamente elegir entre los paquetes en general, tales como oficina, juegos o paquetes para navegar, cada uno con una diferente tarifa por hora; la ampliación de la funcionalidad requiere cambiar a un nuevo paquete.
Controlar la capacidad de una persona para utilizar su computadora sería un nuevo módulo de seguridad, bloqueando una PC a un determinado proveedor, mientras también restringen la funcionalidad. Puede no ser tanta la diferencia de precio teniendo en cuenta que podemos mejorar nuestro equipo con el paso del tiempo, aumentando la vida del mismo. De todas maneras tendremos que ver qué tarifas, que equipos ofrecen, y lo que es más importante, si realmente se atreverán a sacarlo al mercado.
Este método comercial no está diseñado para particulares. No estamos acostumbrados a pagar cuotas por un ordenador y mucho menos a pagar por tiempo. Nuestro cerebro muestra una tendencia descarada hacia la preferencia por las tarifas planas, aunque a veces no nos demos cuenta que podamos estar pagando de más o infrautilizando los servicios. La prueba más clara la podemos ver en el propio ADSL, sobre todo cuando es rápido. A ver quien es el guapo que paga por tiempo de uso o por megas bajados. Y existen múltiples ofertas basadas en ese modelo, pero están diseñados para nichos de mercado muy marginales y sus ventas son igualmente exiguas. Que no, Bill, que no aburras al personal con patentes cochambrosas y dedícate a sacar pronto el Windows 7, que como no te espabiles, al Vista se lo comen los gusanos. Y yo mientras, tan a gusto con mi XP “aliñado”.