La primera vez que hablamos sobre el proyecto Mega-Processor fue en junio del año pasado. Su responsable James Newman invirtió una cantidad considerable de tiempo, dinero y energía, pero finalmente ha declarado al Mega-Processor terminado, y en los últimos días de junio publicó un vídeo en YouTube con un tour completo de su procesador. Por supuesto, decimos «tour» porque el diseño de 40 mil transistores y 10 mil LEDs ocupa las paredes de una sala de estar.
Lo que comenzó siendo un proyecto personal se ha transformado, con mucho tiempo y esfuerzo, en lo que probablemente sea una de las exhibiciones educativas más espectaculares en el mundo de la informática. Hoy en día, el procesador es un componente común, y su evolución a través de las décadas le permitió asimilar por completo notables optimizaciones, aunque más allá de la lógica o la arquitectura, la historia del procesador se puede reducir a transistores. Cuando decimos que el GPU de la tarjeta Nvidia GTX 1080 posee 7.200 millones de transistores, eso nos da una idea de su capacidad, pero no necesariamente de su funcionamiento. Para alcanzar eso, alguien debería construir un procesador «a escala humana», instalando todos los transistores y todas sus interconexiones, una por una.
Bien, ese procesador existe, y se llama Mega-Processor. De acuerdo a su creador James Newman, la versión final posee 40 mil transistores, 10 mil LEDs, mide diez metros de largo por dos de alto, su peso es de media tonelada, devora unos nada despreciables 500 vatios de electricidad, y su frecuencia máxima es de unos 20 KHz (según la página oficial), aunque en el vídeo anuncia una velocidad de 8 KHz. El hecho de poder modificar la velocidad ayuda aún más al proceso de visualización, una verdadera danza de LEDs que ilumina su sala de estar. Registros de proceso general y especial, unidad aritmético-lógica, entradas, salidas, decodificación de instrucciones… todo lo que compone al concepto de «procesador» está ahí.
Si eso no parece suficiente, tal vez quieran saber que el Mega-Processor puede ser programado (después de todo, funciona a la perfección), e incluso muestra en el vídeo un clon del Tetris como demostración. Cualquier interesado en crear software para el Mega-Processor tiene la posibilidad de acceder a las herramientas necesarias en la página oficial, y tras declarar al Mega-Processor «versión 1.0», seguramente veremos más vídeos y actualizaciones por parte de Newman. En lo personal, me alegra mucho verlo terminado. Sin dudas ha sido un «proyecto de un solo hombre», y a pesar de las dificultades, llegó a su objetivo.
