Hace unos días se llevó a cabo el noveno Michelin Design Challenge, un desafío anual donde personas o equipos pueden enviar sus conceptos para el transporte del futuro. El ganador de este año fue el Manta, creado por el belga, David Cardoso Loureiro. Aunque a simple vista parece un pequeño cohete, se trata de un coche anfibio y eléctrico que utilizaría sus ruedas traseras como hélices una vez que llega al agua. Y toda la energía la sacaría de un mismo motor eléctrico, totalmente ecológico.
Mientras que los diseños de BMW para el transporte urbano del futuro despertaron más que nada críticas por parte de nuestra comunidad, estamos seguros que todos podemos acordar que el diseño de este concepto para un vehículo anfibio y eléctrico es espectacular. El Manta, fue el producto del noveno Michelin Design Challenge, un desafío anual donde personas individuales, equipos o estudios pueden enviar sus conceptos para el transporte del futuro. Y como puedes imaginar… ganó Manta.
Bajo la premisa: “Ciudad 2046: Arte, Vida e Inventiva”, los participantes debían crear el prototipo de un vehículo futurista. El ganador, fue el belga, David Cardoso Loureiro, quien creó un coche de tres ruedas con lugar para una sola persona y puede transformarse en una pequeña lancha con tan solo presionar un botón. Como un fanático de los coches que se pasa el día haciendo diseños 3D, crear el Manta fue un verdadero placer y, según explica, el Manta “es un vehículo anfibio para una persona, diseñado para tener un control y velocidad superior, sobre tierra o agua.”
La idea es que este vehículo eléctrico se maneje como un coche tradicional sobre la tierra y, al entrar al agua, las ruedas traseras cambian de posición a 90° para transformarse en hélices. En ambos modos utilizaría el mismo motor eléctrico, convirtiéndolo en un vehículo de cero emisiones tanto sobre tierra como en el agua. Nos gustaría tener más detalles sobre el vehículo, como la velocidad que puede alcanzar tanto en tierra como en agua o en qué número se encontraría su peso, pero teniendo en cuenta que no existe, no hay tales datos.
Lamentablemente, por el momento este vehículo no existe fuera de un disco duro, pero Cardoso Loureiro opina que sería bastante simple de construir y que se transformaría en “un vehículo de bajo costo que le ofrecería al conductor una excelente sensación al manejar.” De eso no tenemos ninguna duda, pero todavía nos estamos preguntando si esta preciosura es capaz de flotar.
