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LuminAR: El flexo inteligente

La entrañable lámpara que nos acompañaba en nuestra mesa de estudio o de diseño, da paso a un avance muy futurista donde esta herramienta de trabajo se convierte en una ayuda robotizada que proyecta datos y que actúa según le indiquemos con nuestros propios gestos. La combinación de tecnología implementada en este instrumento permite unas capacidades que asombran a todos aquellos que hemos crecido con nuestros estáticos flexos de toda la vida. Todo ello de la mano del siempre sorprendente MIT.

Todo aquel que se haya dedicado al diseño, o simplemente a tareas intelectuales, recuerda aquellas noches interminables donde el flexo prestaba su luz para que pudiéramos terminar ese trabajo que se resistía y que teníamos que entregar a la mañana siguiente. Constaba de un brazo articulado que se podía mover en varios ejes y una lámpara final con una bombilla que era la encargada de iluminarnos toda la mesa. La de horas que muchos habrán pasado al abrigo de esta luz y la cantidad de piel de los codos que se habrán dejado encima de la mesa ayudados por estas lámparas.

Pues bien, ahora el MIT, siempre tan inquieto, acaba de reinventar el flexo y lo ha convertido en algo no tan entrañable ni tan estático. Ha dotado al nuevo brazo articulado de un picoproyector Microvision ShowWX laser de enfoque automático, una cámara y un computador ultracompacto que emite vía wireless las instrucciones. Este flexo inteligente es capaz de moverse por el espacio que hay encima de tu mesa de trabajo y responder de modo interactivo a tus gestos. Simplemente con desplazar la mano por el lugar adecuado, LuminAR capta el movimiento y recibe el gesto como una orden que le hace proyectar diferentes opciones sobre la mesa. La propia imagen que emite el brazo-flexo interactúa de forma impresionante con nuestros propios dedos. Por ejemplo, la proyección de un teclado sobre la superficie, se convierte automáticamente en un teclado funcional que puedes usar como si fuera uno físico.

Esta maravilla, que mezcla funcionalidad y comodidad gracias a la tecnología, no creemos que sea muy cara(relativamente). El picoproyector que utiliza cuesta 549 dólares, cantidad que a priori nos puede parecer algo exagerada para tratarse del componente de un simple flexo, pero hay que tener en cuenta la tecnología que lleva incorporada. Hace tan sólo unos años, este artilugio habría costado 100 veces más y seguramente con menos calidad. Realmente fascina comprobar cómo avanza la informática aunque sea en lámparas tan prosaicas como la que ha diseñado el MIT.

Escrito por imported_Kir

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