Los ordenadores tienen una historia evolutiva muy rica en la que se nos han presentado modelos de tamaños inmensos y otros de ridículas dimensiones, todos con diferentes potencias y funcionalidades. Dentro de los fabricantes grandes de los ordenadores más chicos, Stealth se destaca por ser prolífero y reconocido, y hace unos días presentó la más potente de las pequeñas PC: la LPC-670. Una Mini PC con procesador Intel i3/i5/i7.
Mientras las netbooks y las tablets buscan cobijar las necesidades de portabilidad que algunos usuarios creen que las laptops dejaron de tener y también asisten a aquellos con ansias de expandir la potencia y cualidades de los smartphones actuales, hay otro tipo de dispositivo que si bien no tiene una popularidad trascendental, no dejan dudas de sus beneficios. Estamos hablando de los Mini PCs, que construidos principalmente por la canadiense Stealth durante casi 20 años, se ubican en un mediano nivel entre potencia y portabilidad, sirviendo sobre todo para proyectos donde el espacio esté limitado o se tenga que evitar la invasión espacial que produce todo un ordenador de escritorio convencional. Quienes mayormente utilizan este tipo de dispositivos son las industrias militares como las de las telecomunicaciones, y como estas mini PCs están sujetos a la misma caducidad de los ordenadores convencionales, era tiempo de ver algo más poderoso.
La nueva mini PC de Stealth trata de conseguir esta demanda y en su tamaño rectangular que no supera los 16.6 cm en ancho, 15.7 de profundidad y 4,8 de alto (vista como se utiliza), este ordenador en miniatura contiene en su interior un ejemplar de los nuevos procesadores mobile, un Intel Core i7/i5/i3 que provee la suficiente capacidad de cálculos como para ganarse un lugar encumbrado entre los ordenadores de estas características dimensionales. Esta inclusión no es menor, ya que las posibilidades de utilización se amplían en cantidad, sobre todo al ofrecer tres modelos de procesador con sus respectivos rendimientos, aunque el modelo estándar se quede en el medio con el i5 520M corriendo a 2.4 Ghz, una número nada despreciable para un ordenador del tamaño de una lectora de DVD.
Pero con un procesador no hacemos nada, por eso la LPC-670 de Stealth soporta hasta 8GB DDR3, un disco duro de unos 6.35 cm con capacidad de 750gb y el resto de lo necesario como para que esto sea un ordenador y no una caja de bombones de metal. A saber, una placa de vídeo, audio 5.1, conector DVI-I, WIFI, lectograbadora de DVD, etc. Lo que nos gustó de las especificaciones de esta Mini PC que se alimenta a través de adaptador/transformador de 12 a 20V es la libertad para ampliarse y expandir su potencia, ya que tanto en el disco duro puede optarse por una unidad de estado sólido, como la grabadora puede ser de Bluray. Para satisfacer a unos y otros, se podrá utilizar tanto Windows como Linux y lo único que por ahora vimos grande en esta mini PC es su precio, que ronda los US$ 1650 dólares. Ahora, ¿vale la pena el gasto dada la existencia de las tablets y netbooks? Cuéntanos qué opinas.
