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Los libros ponen a Rapidshare contra las cuerdas

La popular Web de almacén de archivos acaba de recibir un enorme varapalo al haber perdido un juicio en Alemania por delito contra la propiedad intelectual. En este caso han sido los libreros quienes interpusieron la denuncia por considerar que el sitio contenía material protegido con derechos de autor. La corte alemana ha fallado en contra de Rapidshare y le ha impuesto una durísima sentencia. Con esta ya son dos las derrotas judiciales que lleva sobre su espalda el mayor sitio de descargas directas.

No hace mucho que Rapidshare se tuvo que enfrentar a un juicio donde se le acusaba de infringir la ley por contener miles de canciones que tenían copyright. Lo perdieron y se les ordenó que implementaran filtros más eficaces para impedir la proliferación de música protegida. Ahora han sido los representantes de la cultura escrita los que han atacado con ferocidad a la famosa Web de archivos y la justicia no sólo les ha dado la razón sino que ha ordenado unas medidas durísimas contra Rapidshare, seguramente con la intención de dar ejemplo y acabar de una vez por todas con la piratería.

El caso fue presentado por las 6 compañías mas poderosas del sector librero americano: Bedford, Freeman & Worth and Macmillan, Cengage Learning, Elsevier, The McGraw-Hill Companies y Pearson. Han denunciado la presencia de 148 libros de su catálogo en los servidores de Rapidshare. La corte de Hamburgo ha considerado probada la existencia del material y ha obligado a la empresa de descargas directas que los retire inmediatamente y, además, por cada vez que se vuelva a descargar un libro de esa colección, le caerán hasta 339.000 dólares de multa y a los responsables de la empresa se les podría llevar a la cárcel hasta 2 años. Los dueños dicen que apelarán esta decisión judicial por considerarla completamente desproporcionada.

Los demandantes se muestran muy ufanos ante la sentencia. Tom Allen, CEO de la Asociación Americana de Editores comentó que esto es un “gran paso” ya que demuestra que compartir archivos con derechos de autor, al menos en Alemania, es ilegal y que por ese motivo otros que hacen lo mismo deberían tenerlo en cuenta. Sin embargo, resulta paradójico comprobar que almacenar un libro en un servidor pueda acarrear 2 años de cárcel y multas millonarias cuando existen crímenes muchísimo más graves que no alcanzan ni la décima parte de consecuencias penales. La justicia alemana quizá ha perdido la perspectiva pero estas sentencias puede que se repitan en el futuro, acabando por completo con las páginas de descargas directas.

Escrito por imported_Kir

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