Un aspecto que suele olvidarse por completo a la hora de realizar respaldos y reinstalar sistemas operativos es guardar copias de todos los códigos y números de serie que muchos programas utilizan para verificar su legitimidad. En estos días, la mayoría de los productos han trasladado sus mecanismos de activación a Internet, pero todavía quedan aplicaciones que almacenan claves en el Registro de Windows. Si deseas recuperar a alguna de ellas, tal vez quieras hacer la prueba con LicenseCrawler.
Debo admitir que en más de una oportunidad he perdido números de serie, ya sea por tomar nota de ellos en cualquier trozo de papel, o directamente extraviar los manuales en donde venían escritos. A modo de ejemplo, todavía poseo un CD original de Windows 95, pero no me pregunten dónde, cuándo o cómo desapareció el manual con su certificado de autenticidad. Las activaciones en línea han reemplazado en gran medida a las verificaciones offline, aunque todavía quedan muchas excepciones. Sin ir más lejos, las últimas versiones de Windows todavía permiten activaciones por vía telefónica, y después hay ejemplos como FastStone Capture que usa número de serie, o Total Commander, el cual introduce en su carpeta principal un archivo especial con extensión «.key». El propio Windows (al menos en su versión 7 y anteriores) guarda una copia de la clave de producto en el Registro, pero Microsoft no brinda ningún método sencillo para que la recuperes.
En esos casos es cuando intervienen herramientas al estilo de LicenseCrawler. Este pequeño programa portátil realiza una búsqueda global dentro del Registro de Windows, y presenta al usuario todo aquello que ha identificado como número de serie o clave de producto. Su capacidad de detección es bastante robusta, y no sufre mayores problemas con el software de Microsoft, pero desactivar la opción de alta velocidad debería ayudar en ciertas ocasiones donde el número deseado no es reportado. Una vez que las claves aparecen en la lista, todo lo que debes hacer es copiar el contenido a un archivo de texto, y volver a usarlas tras la reinstalación.
LicenseCrawler es gratuito para uso personal, pero sus constantes recordatorios de esta condición y las sugerencias de adquirir una licencia comercial lo colocan en el territorio del nagware. Por suerte, eso no limita su funcionalidad, no es un programa que deba ser usado diariamente, y sabemos que está limpio, a diferencia de otros «crawlers» de números de serie que vienen cargados con adware.