Los fans del universo DC tienen razones de sobra para sentirse decepcionados con el curso que han tomado sus películas, y la situación a nivel cómic sigue siendo igual de confusa (pasando de un reboot al siguiente), pero si crees que esto es lo más extraño que han vivido los superhéroes de DC, te equivocas. En enero de 1979, Hanna-Barbera emitió una serie live action con dos episodios llamada Legends of the Superheroes, inspirada en los Súper Amigos, y que básicamente sirvió como reunión para el elenco original de Batman, con Adam West, Burt Ward, y Frank Gorshin.
Esta historia comienza en septiembre de 1973, el sábado 8 para ser más precisos. Hanna-Barbera y la cadena ABC lanzan a «Super Friends», los «Súper Amigos», grupo formado por Superman, Batman, Robin, Aquaman, Wonder Woman, dos jóvenes detectives (Wendy y Marvin) y un perro que habla (El Perro Maravilla), una clara referencia a Scooby-Doo. Los Súper Amigos tomaron por asalto las emisiones de dibujos animados en la mañana de los sábados, y se mantuvo en pantalla por 13 años, divididos en 9 temporadas y 109 episodios. Uno de los cambios más importantes en la serie llegó con la tercera temporada (emitida de septiembre a diciembre de 1978), con el llamado «Reto de los Súper Amigos», el cual introdujo a la Legión del Mal y su Salón de la Maldad, además de expandir al equipo original con nuevos héroes. Una vez finalizada esa temporada, Hanna-Barbera decidió explorar (en cierto modo) el potencial live action de un formato similar al de Reto de los Súper Amigos… lo que nos deja a las puertas de «Legends of the Superheroes».
La serie presenta a Batman, Robin, Linterna Verde, Capitán Marvel, Flash, Hawkman, Huntress y Black Canary, un equipo más que decente considerando la ausencia de Superman y Wonder Woman (ambos personajes con producciones activas en ese momento). En el primer episodio, los superhéroes reciben un desafío por parte de un grupo de supervillanos que incluye al Acertijo, Sinestro, Mordru y Giganta, entre otros. Básicamente tienen que evitar la detonación de una bomba, y salen a buscarla siguiendo las pistas de los villanos. La mayoría de la acción (si es que podemos llamarla así) se concentra en Batman y Robin, protagonizados una vez más por Adam West y Burt Ward, mientras que del lado de los villanos encontramos a Frank Gorshin, volviendo a colocarse el traje del Acertijo. El segundo y último episodio no es otra cosa más que un brindis cómico (el famoso «roast») enfocado en los superhéroes.
Y sí, es horrible, no tiene sentido negarlo. Aún si no perdemos de vista el hecho de que Legends of the Superheroes era un contenido orientado a los más pequeños, la calidad es tan baja que no sabemos cómo aprobaron su creación, y cualquier episodio promedio de la Batman original lo supera con creces. El proyecto finalizó tras dos emisiones, y Súper Amigos continuó en el clásico formato animado, pero Legends of the Superheroes logró sobrevivir gracias a una edición especial en DVD, y todo el material publicado en la Web. Después de haber visto esto, creo que el Universo Extendido DC no está nada mal. Hemos avanzado mucho.
Claro que hemos avanzado, en escenografía, FX y demás cosas, pero en el argumento y el guion creo que seguimos igual 🙁