Las mejores películas de “horror cósmico”, a lo H.P. Lovecraft

¿Así que el humano creía que había conquistado el viaje espacial solo por ser capaz de resolver alguna que otra compleja ecuación? Pffff. ¡Ilusos! Como bien dijo el maestro de lo oscuro, "algún día la reconstrucción de conocimientos dispersos nos dará a conocer tan terribles panorámicas de la realidad, y lo terrorífico del lugar que ocupamos en ella, que sólo podremos enloquecer como consecuencia de tal revelación, o huir de la mortífera luz hacia la paz y seguridad de una nueva era de tinieblas." ¡Y vaya si ese día de revelación ha llegado en "Event Horizon"! Ciencia ficción y horror cósmico mano a mano, en una de las mejores películas del género de todos los tiempos. Aterradora y perturbadora por dónde se la mire.

Los primeros segundos de "La Invasión de los Usurpadores de Cuerpos" son un ejemplo de manual de aquello a lo que llamamos horror cósmico. Algo mucho más antiguo y evolucionado que nosotros, totalmente indiferente al sufrimiento humano, se desliza por el vacío espacial -sin esfuerzo alguno- hasta alcanzar el planeta Tierra. Allí, nosotros, tan plácidos en nuestra isla de ignorancia, apenas si nos percatamos de que estamos ante el comienzo del fin de nuestra miserable y patética existencia. De visión obligatoria.

Una de las tantas gemas de los años 90s salida de la productora Dimension Films, y una que bien podría haber sido una secuela digna de la excepcional "The Thing", de John Carpenter (salvando las distancias). De hecho, Phantoms es mucho mejor y más genuina que la precuela de 2011, ¡y sin siquiera intentarlo! Es cierto: la primera mitad del filme no se despega demasiado de lo que uno puede esperar de una película de horror del montón. Un pueblo abandonado de la noche a la mañana, sin razón aparente. Monstruosidades que reptan en la oscuridad. Un grupo de desafortunados humanos, metidos en el medio. Pero a medida que avanza la trama, te comienzas a dar cuenta que estos no son fantasmas "comunes y corrientes", hay algo mucho más aterrador en todo este asunto. ¡MUCHÍSIMO MÁS ATERRADOR! MUAJAJAJAJA.

"The Mist" es claustrofóbica y agobiante. Todo sucede un día cualquiera, como puede ser hoy, ahora mismo. Una espesa y espeluznante niebla envuelve una pequeña ciudad de Estados Unidos. Y no, detrás de esta niebla no se ocultan fantasmas de leprosos, como sí sucede en "The Fog" (1980), un filme con una premisa similar. Lo que se esconde en la niebla de "The Mist" es mucho, muchísimo, más escalofriante. La colisión de dos mundos, donde sólo uno puede reinar. Por un lado, nosotros. Humanos ignorantes y completamente inconscientes del lugar que ocupamos en el universo. Por el otro, criaturas de pesadillas. Monstruosidades para las que solo somos alimento, la parte más débil de su complejo ecosistema. "The Mist", como bonus, incluye uno de los mejores peores finales en la historia del cine. ¡Yo te avisé!

Más extraterrestres con el poder de aniquilar a la raza humana sin siquiera esforzarse. Dos películas de culto: la original de 1958 es hermosa, pero yo prefiero la remake del 88, que tiene muchas más visceras explotando en pantalla. El monstruo de "The Blob" es una gelatina roja que comienza super pequeñita, pero que puede crecer ilimitadamente al comer seres vivos. No la daña (casi) nada y, si no se contiene, podría comerse al mundo entero... Yo creo que de todos los monstruos en esta lista, la muerte ocasionada por The Blob debe ser la más dolorosa de todas: lentamente digerido por el corrosivo ácido que compone a la burbuja asesina. 100% culto.

No es una película, sino un episodio de la serie "Masters of Horror" (que es como un "Black Mirror" pero del género terror). Cada capítulo dura casi una hora y, como son unitarios, se pueden ver por separado sin perjuicio alguno. Este es excepcional, así que cabe. En lo personal, me gusta verlo como un "derivado" de la trilogía del "Fin del Mundo" de John Carpenter, especificamente de "In The Mouth of Madness". Tiene una temática similar y es dirigido por el mismísimo maestro del horror cósmico. Trata de un especialista de arte que es contratado para encontrar el filme "La Fin Absolue du Monde", de Hans Backovic. Una rareza fílmica que ha enloquecido a cuanta persona la haya visto, generando verdaderas masacres allí donde haya sido proyectada. Si te cuento más, pierde el misterio. Muy recomendada.

"Vinieron a la Tierra para alimentarse de carne humana", reza el poster de esta belleza de bajo presupuesto. Son engendros letales, aberraciones galácticas que han venido a hacernos su cena. Pequeños gusanos al principio, pero que crecen y se multiplican al comer carne humana. "The Deadly Spawn" es una película muy clase Z, sí, pero con una gran imaginación puesta al servicio de superar los obstáculos y las limitaciones de un presupuesto super acotado (apenas 25.000 dólares), que la exime de cualquier falencia. Al principio, "The Deadly Spawn" no parece ser mucho más que un filme de monstruos. Pero a medida que transcurren los minutos, y vemos las mutaciones de los bichos, nos damos cuenta que este es un asunto serio, en donde la humanidad tiene todas las de perder. Y el final, oh, ¡ese hermoso final lleno de horror cósmico! Una de mis favoritas del género "alimañas espaciales". Super recomendada.

Al principio, "The Midnight Meat Train" parece una película de asesinos seriales de lo más estándar. La de un loco violento, pero metódico, que mata a los pasajeros del último metro de medianoche, y los cuelga descuartizados del techo de los vagones. Un festival de sangre y tripas, pero que poco parece tener de horror cósmico. Bueno, no quiero arruinarte la sorpresa final, ya demasiado con que esta película figure en esta lista. Baste decir que está basada en un relato de Clive Barker, uno de los más grandes maestros de la literatura de horror, y también de los mejores alumnos de la escuela lovecraftiana. Muy ominosa.

Ay, ¡pero qué tontos somos! Niños ciegos, sordos y bobos, a los tropiezos en un laberinto interminable, lleno de trampas letales en las que estamos destinados a caer. De eso trata "Life", película que ha sido muy comparada -injustamente- con Alien (1979): de la imprudencia humana a la hora de explorar el abismo y de las terribles consecuencias de nuestra propia ineptitud. Y así, lo que comienza como un inocente y cándido intento por estudiar a un pequeño organismo alienígena encontrado en Marte, termina siendo el medio de nuestra propia aniquilación. Una estación espacial, un grupo de científicos humanos y un extraterrestre que se los quiere comer a todos, aunque al principio parezca inofensivo. La curiosidad, nuestro Talón de Aquiles. Horror cósmico puro y duro.

¿El color que cayó del cielo? No, ¡más bien la muerte que reptó desde las profundidades! "The Ruins" es una película chica, pero escalofriante. Al comienzo, da un poco de bronca porque parece algo genérica, llena de adolescentes lindos y despreocupados, con muy poco que ofrecer. Pero si esperas a que la trama espese un poco, el horror se hace evidente de la peor forma posible. Las ruinas perdidas de una antigua civilización, una tribu de locales en actitud sospechosa y jóvenes turistas metiéndose en terribles problemas. Una de esas películas que pasó sin demasiada pena ni gloria por las taquillas, pero que esconde un espeluznante viaje a lo que acecha en el centro de la Tierra.