Un equipo de físicos acaba de colocar en una posición muy difícil a la teoría de gravitación estándar. Basándose en mediciones de las galaxias que orbitan alrededor de la nuestra, obtienen unos datos que contradicen abiertamente la vieja teoría de Newton. Representa tal desafío que un buen número grupo de colegas han respaldado sus ideas y se muestran de acuerdo en que la teoría de Newton debería ser modificada.
El equipo de físicos que ha medido la situación de las galaxias satélite que giran alrededor de la Vía Láctea asegura que su posición actual no concuerda con la que deberían tener si siguieran el modelo cosmológico estándar. Tanto la distribución de dichas galaxias como la materia oscura que hay aparentemente dentro de ellas, desafía abiertamente a las leyes que Newton emitió hace tantos años y que hasta ahora se han revelado ciertas en su marco de referencia. “Hay algo extraño en su distribución”, afirmó el Profesor Pavel Kroupa de la Universidad de Bonn en Alemania. “Deberían estar uniformemente ordenadas alrededor de la Vía Láctea, pero no es esto lo que encontramos”. Los modelos cosmológicos estándar predicen la existencia de cientos de estas compañeras alrededor de la mayor parte de las galaxias más grandes, pero hasta el momento sólo se han observado 30 alrededor de nuestra galaxia. Los astrónomos de Alemania, Austria y Australia observaron que existen apenas unas cuantas galaxias enanas orbitando alrededor de la Vía Láctea y, además, las once galaxias enanas más brillantes giran alrededor de nuestra galaxia en el mismo plano – como si fuera un disco- y orbitan en la misma dirección alrededor de la Vía Láctea, es decir, lo mismo que hacen los planetas del sistema solar alrededor del Sol. El profesor Kroupa piensa que esto sólo ha podido darse si las galaxias satélite actuales se formaron en antiguas colisiones entre galaxias jóvenes. Los físicos declaran que la teoría de grativación de Newton debería modificarse. Así de rotundo y así de claro.
El Doctor Metz, otro integrante del grupo, explicó: “Los fragmentos de colisiones iniciales pueden formar las galaxias enanas orbitales que vemos hoy, pero esto introduce una paradoja. Los cálculos sugieren que las galaxias enanas satélite no pueden contener nada de materia oscura si se crearon de esta forma. Pero esto contradice directamente otras pruebas. A menos que la materia oscura esté presente, las estrellas de las galaxias se mueven mucho más rápido de lo predicho por la teoría de la gravitación estándar de Newton”. Metz termina con una contundente afirmación: "La única solución es rechazar la teoría de Newton. Si vivimos en un universo donde se aplique una ley modificada de gravitación, entonces nuestras observaciones sería explicables sin materia oscura”. Estas pruebas han sido presentadas en las revistas Monthly Notices of the Royal Astronomical Society y Astrophysical Journal. Se espera sean sometidas al análisis exhaustivo del resto de científicos para consolidar su validez y comenzar un debate sobre la posibilidad de modificar la ley de gravitación universal de Newton.
Hay que tener en cuenta que unos datos de este calibre tienen que ser inspeccionados concienzudamente para evitar errores de cálculo o de interpretación. De todos modos, tampoco hay que alarmarse. La teoría de Newton ya ha sido modificada varias veces y no ha muerto nadie en el intento. En el siglo XX ya sucedió cuando Einstein introdujo sus Teorías de la Relatividad Especial y General y de nuevo cuando se desarrolló la mecánica cuántica para explicar la física a escalas subatómicas. La gravitación de Newton sigue funcionando en el marco de referencia para el cuál fue pensada, esto es, que si tiras una piedra por encima de tu cabeza y no te apartas, te garantizamos que la velocidad del impacto en tu cráneo será justo la que se obtiene de aplicar la fórmula de Newton.
Junto con estos físicos, existe un gran número de científicos que piensan que los principios fundamentales de la física han sido comprendidos de forma incorrecta. Las anomalías detectadas por el Dr. Metz, el Profesor Kroupa y sus colaboradores implican que donde predominan aceleraciones débiles, puede usarse una “dinámica Newtoniana modificada”. Si esto se confirma de manera fehaciente, podríamos estar ante una nueva revolución de la física que tendrá grandes consecuencias en la manera que tenemos de entender el universo.
