Algunos coches nos provocan admiración. Otros nos llenan de asombro. Y otros directamente nos dan escalofríos. ¿Pero qué pasa cuando encontramos un coche que genera estas tres cosas al mismo tiempo? Hay veces en las que diseñar un coche deportivo parece apenas un justificativo para que los ingenieros dejen salir de sus cabezas las ideas más locas, y gracias a los conceptos, pueden darles incluso un marco físico. Sin embargo, el Sesto Elemento de Lamborghini no es ninguna locura. Es belleza, es tecnología… y es impresionante.
Parece mentira que esta creación haya salido de una empresa que originalmente se dedicaba a fabricar tractores usando partes de repuesto recuperadas de vehículos militares abandonados en la Segunda Guerra, pero hoy en día Lamborghini está muy lejos aquellos utilitarios para agricultura. De hecho, sobrevivió tiempos muy difíciles en los cuales los coches deportivos de lujo simplemente no tenían lugar en un mercado golpeado, como por ejemplo la crisis petrolera de 1973. De la mano de Audi, Lamborghini recuperó gran parte del prestigio perdido, pero la más reciente crisis financiera (de la cual todavía pueden sentirse las secuelas) volvió a afectar los niveles de ventas para esta clase de vehículos. Sin embargo, el talento y el estilo no se toman vacaciones ni en los períodos más complicados. Hacía ya varios meses que se venían filtrando detalles sobre el famoso "Sesto Elemento", pero la más reciente edición del Paris Motor Show arrojó todos los rumores a un rincón. Aquí está, este es, el Sesto Elemento Concept.
El nombre "Sesto Elemento" no representa a otra cosa más que el carbono, sexto elemento en la tabla periódica, y resulta más que adecuado debido a la construcción del coche. Chasis, cuerpo, cardán, suspensión, y otra larga lista de componentes han sido fabricados con fibra de carbono. Ni siquiera el sistema de escape se escapó a este material, elaborado con una variante de alta resistencia térmica conocida como PyroSic. La utilización a gran escala de la fibra de carbono permite que el Sesto Elemento tenga un peso de 999 kilogramos. En lo que se refiere a su motor, todo parece indicar que tomará prestado el corazón de la última edición del Lamborghini Gallardo: 5.2 litos, 570 caballos de fuerza, 0 a 100 en apenas 2.5 segundos, y una velocidad máxima estimada de 299 kilómetros por hora.
La apariencia es, sencillamente, escalofriante. Alguna vez me he preguntado cómo se vería un coche con un diseño similar al del F-117A, y con este concepto, Lamborghini acaba de disipar esa duda. El Sesto Elemento ha sido presentado como concepto, y de momento se mantendrá así, por lo que no tiene sentido estar preocupándose por la cuestión del precio, a menos que algún jeque árabe pueda comprar un par por adelantado. ¿Tendrá preparada alguna respuesta la gente de Ferrari? Hay muchos rumores sobre un supuesto "F70", con el mismo peso que el Sesto Elemento, y una velocidad máxima que excedería los 370 kilómetros por hora, pero hasta que no veamos una imagen, Lamborghini tendrá la iniciativa.