La nueva serie de consolas Xbox está a la vuelta de la esquina, y como era de esperarse, buena parte de la atención periodística se concentra en la Xbox Series X, rival directa de la PlayStation 5. Sin embargo, ambos fabricantes ofrecen alternativas digitales que probablemente sean más interesantes para aquellos usuarios decididos a priorizar la relación precio-rendimiento. Por el lado de Redmond, esa alternativa es la Xbox Series S, y el Modern Vintage Gamer en YouTube ha realizado una excelente cobertura, que también incluye el desmontaje de la consola.
Xbox Series S: ¿Una opción más competitiva?
El año 2020 ha sido un verdadero torbellino en materia de hardware. Tenemos nuevos procesadores, nuevas tarjetas gráficas, y por supuesto, nuevas consolas de videojuegos. Microsoft y Sony, Xbox y PlayStation, subirán una vez más al ring para medir sus fuerzas y seducir a una legión de jugadores que cada vez pide mejores gráficos y mayor velocidad. A mediados de marzo compartimos varios detalles técnicos sobre la PlayStation 5, y los comparamos con la oferta de la Xbox Series X. En términos generales, ambos sistemas están muy parejos, y la calidad de sus juegos será determinante.
Pero esas consolas representan la mitad de la ecuación. En esta generación, ambas compañías hicieron una seria apuesta al concepto de «edición digital», con unidades que reciben e instalan sus juegos a través de Internet. En el caso de la PlayStation 5, su variante digital posee el mismo hardware de la edición estándar, y por ese motivo es que su precio pierde un poco de competitividad. Sin embargo, la Xbox Series S cuenta con varios ajustes en sus especificaciones (por ejemplo, la mitad de capacidad de procesamiento y un GPU más lento), pero lo compensa con un precio de apenas 300 euros.
Cómo desmontar a la Xbox Series S
Es necesario reconocer que la prensa especializada no le ha concedido el mismo nivel de atención a estas alternativas más económicas, pero una de las excepciones fue el Modern Vintage Gamer en YouTube, quien obtuvo una Xbox Series S, y después de publicar una serie de vídeos que incluyen un review general y el uso de raytracing en ciertos juegos, hoy compartió el teardown completo de la consola. El primer detalle para destacar es que su unidad no tiene fajas de garantía. Los dos tornillos Torx T8 están ocultos bajo dos etiquetas, y el ingreso inicial a la consola no presenta obstáculos mayores.
La segunda fase del teardown es retirar los tornillos Torx T10 de color verde, que son mucho más largos de lo esperado. Una vez retirada la cubierta superior, descubrimos un diseño que nos recuerda a aquellos viejos discos duros de 10 o 20 megabytes a mediados de los ’80. Al quitar el blindaje metálico, el ventilador y la fuente de alimentación quedan completamente expuestos. Otro detalle relevante aquí es que la Xbox Series S sólo tiene un cable interno, que pertenece al ventilador. El resto de sus elementos son modulares, y se conectan de manera directa al PCB. Tanto el formato como el conector de la fuente de alimentación son propietarios de principio a fin, y en su plástico podemos apreciar un pequeño sello con el casco del Jefe Maestro.
Al estudiar más de cerca su PCB, la Xbox Series S revela un header de depuración, y MVG básicamente dio a entender que si alguien quiere hackear la consola, debería comenzar por ahí. Todos los puertos poseen pequeños pads, con el objetivo de reducir el ruido, el ingreso de polvo, y otras cosas que preferimos mantener lejos. Los módulos se mantienen en posición con la ayuda de tornillos Torx T10, y para retirar al PCB, antes debemos liberar un mecanismo sobre el puerto USB.
Finalmente, la consola nos da una pequeña sorpresa: El almacenamiento sólido no está soldado, sino que utiliza una ranura m.2 convencional. Considerando el perfil digital de la Xbox Series S, imagino que habrá muchos usuarios interesados en expandir su capacidad (de los 512 GB, 360 están disponibles), pero es probable que Microsoft no resista a su propia naturaleza, y las unidades estén «asociadas» de algún modo a la placa base, impidiendo su reemplazo. En lo personal, espero que hagan una excepción… esta vez.
Xbox Series S a 300 euros: ¿Sí o no?
A pesar de los ajustes en sus especificaciones, la consola Xbox Series S se perfila como una opción muy atractiva para quienes deseen acceder a la última generación de juegos sin realizar una inversión extrema. Lógicamente, tenemos dudas sobre la durabilidad o el «valor a futuro» de una consola que sólo recibe juegos por vía digital, pero Microsoft respondió con acceso a GamePass y una retrocompatibilidad superior. También debo admitir (a regañadientes) que un PC de 300 euros no está necesariamente en condiciones de competir (por el momento) con una Xbox Series S a la hora de jugar. ¿Estás pensando en una Xbox Series S para la temporada de Navidad? ¡Deja un comentario!