En la mañana del 20 de marzo de 1995, el metro de Tokio sufrió una serie de ataques terroristas con sarín, matando a 13 personas (una de ellas después de pasar varios años hospitalizada) y afectando a otras 1.000. Dichos ataques fueron organizados por la secta apocalíptica conocida como Aum Shinrikyō, y su líder Shoko Asahara. La secta realizó varios experimentos con material audiovisual para expandir su influencia y sumar miembros desde su fundación en 1984, pero hay uno que se destaca sobre el resto, y es el juego llamado «La Historia del Pueblo Kamikuishiki». A simple vista es extraño y perturbador, sin embargo, su historia es más profunda…
Una de las primeras cosas que hace la clase política cuando surge un brote de violencia entre los más jóvenes es culpar a los videojuegos, como si tuvieran una especie de «voluntad propia» centrada en sembrar el caos. Los videojuegos son simplemente un medio. Siempre existe una o varias mentes detrás de ellos, pero hay ocasiones en las que incluso ese detalle puede generar confusión. Así llegamos a un caso muy particular, que es el de la secta apocalíptica japonesa Aum Shinrikyō.
Durante sus primeros años de actividad, el grupo utilizó radio, anime, manga y revistas para propagar sus «enseñanzas». Por supuesto, todo cambió a principios de los ’90 cuando comenzaron a conocerse sus actos de terror (con cierto énfasis en el asesinato de opositores, y de miembros que deseaban salir del culto). Pero entre los ataques con químicos, las amenazas, las desapariciones, la tortura y la muerte… apareció un videojuego. Extraño y perturbador, aún para quienes no entienden el idioma. Su nombre se traduce a «La Historia del Pueblo Kamikuishiki», y al parecer, la Web moderna está obsesionada con resolver sus misterios.
«La Historia del Pueblo Kamikuishiki» ha sido clasificado como «doujin soft», un juego hecho por un entusiasta a modo de diversión. Esto deshace la idea de que fue un proyecto oficial de Aum Shinrikyō, y lo ubica en una línea de sátira-trolling-shitposting, a pesar de las múltiples publicaciones en YouTube que hablan sobre control mental y lavado cerebral. Otro dato interesante es que el juego habría sido publicado por primera en vez en junio de 1995, apenas tres meses después de los ataques.
Ahora, Kamikuishiki es un lugar real, que sirvió de «cuartel general» para Aum Shinrikyō y su fundador Shoko Asahara, ejecutado el año pasado. El hecho de que aparezca en el nombre del juego revela (hasta cierto punto) cuál es el objetivo del jugador: Construir el pueblo, controlar y expandir al culto hasta alcanzar la fase final, que es el ataque al metro. En caso de no lograrlo, su condición de derrota provoca el fin del mundo.
Durante la partida se reproducen escenas registradas por la prensa japonesa que ciertamente no son favorables para Aum Shinrikyō, incluyendo los ridículos intercambios entre sus voceros y los periodistas locales. Una vez más, la teoría de la sátira gana fuerza, y viene asociada con un nombre: Yoshihisa «Kowloon» Kurosawa, mucho mejor conocido por «Hong Kong 97», tal vez uno de los peores videojuegos de la historia.
Hong Kong 97 fue desarrollado y publicado por HappySoft Ltd., compañía que aparece como desarrolladora de «La Historia del Pueblo Kamikuishiki» en viejos anuncios publicitarios de revistas «under». Si observamos el gameplay de ambos juegos, no es difícil imaginar que son primos muy lejanos, más allá de las diferencias en los géneros (semi-estrategia vs. bullet hell).
Kurosawa insiste en que no fue él quien creó a «La Historia del Pueblo Kamikuishiki», pero admite que conoció a los responsables: Dos de sus amigos, ambos programadores muy talentosos, que aún se encontraban en la secundaria por aquel entonces. La intención de Aum Shinrikyō de entrar al circuito político, la constante exposición del culto al público por parte de la prensa y los efectos del ataque terrorista habrían servido como «inspiración» para hacer al juego. Ese equipo de programadores utilizaba el nombre de «Kanai Karasawa», y de acuerdo con Kurosawa, «La Historia del Pueblo Kamikuishiki» fue apenas uno de muchos juegos.
Kurosawa compartió otro detalle extra: Uno de ellos terminó entre las filas de Konami. Las comunidades japonesas dedicadas a los videojuegos retro sumaron esta información a la descubierta en el archivo readme de otro juego de Kanai Karasawa, y creen que se trata de Takeshi Kanai y Kouichi Kanasawa. Kanasawa fue programador para Konami en al menos media docena de proyectos. Finalmente, Kurosawa confirmó sus identidades, pero ninguno de ellos admitió su relación con el juego.
Entonces, todo parece indicar que «La Historia del Pueblo Kamikuishiki» es una sátira a cargo de dos jóvenes de secundaria que buscaban burlarse del culto. ¿Por qué resulta tan perturbador? Una de las razones es que muchas de sus imágenes son efectivamente propaganda legítima de Aum Shinrikyō, reproducida y reciclada hasta el cansancio por la televisión japonesa.
Aum Shinrikyō sigue en actividad hoy, dividido en dos grupos: «Aleph», y «Hikari no Wa».
Fuente: VICE