El CeBIT de este año finalmente ha llegado a su conclusión, y a pesar de la menor cantidad de puestos y visitantes que tuvo, eso no quiere decir que haya sido menos rica en tecnología. Kingston dio una muy buena demostración de lo que puede hacer un ordenador con cantidades masivas de memoria RAM, o mejor dicho, masivas en comparación a lo que estamos acostumbrados a ver en un ordenador de escritorio. Combinados con un hardware de ensueño, Kingston mostró sus módulos de 4 GB de RAM DDR3, sumando un total de 24 GB de RAM en un solo ordenador.
Los módulos fueron presentados como "muestras de ingeniería" del tipo ValueRAM, y se espera que estén disponibles en el mercado a finales de este año. De hecho, en el vídeo disponible más abajo Kingston revela el costo de pre-producción de estos módulos: Por encima de los €1580. Claro que un costo así (cerca de €260 por unidad) convertiría de forma automática a estos módulos en algo prohibitivo, pero demás está decir que los costos de producción de memoria tienden a bajar de forma drástica. Recordemos por un momento los precios iniciales de las memorias DDR3, y su comparación con las memorias DDR2. Sin ir más lejos, 1 GB de memoria DDR3 tiene actualmente el precio aproximado de 2 GB de memoria DDR2, cuando antes la diferencia era muchísimo más grande.
Para la presentación, Kingston sometió a sus módulos a una extensa prueba utilizando Memtest86+, una de las utilidades más confiables a la hora de comprobar la estabilidad de la memoria RAM. El vídeo nos muestra una prueba de más de 17 horas, lo que sin dudas garantizó la estabilidad del sistema. Como si fuera poco, Kingston también ejecutó varias instancias virtualizadas de Windows Vista bajo VMWare. Se ejecutaron nueve instalaciones virtualizadas al mismo tiempo, sobrando aproximadamente 3 GB para el sistema principal, que también era Windows Vista. Para rematar, ejecutaron Crysis dentro de un entorno virtualizado, lo que elevó más el consumo de memoria. Claro que no pudieron hacer otra cosa más que abrirlo y cerrarlo, debido a que la aceleración de vídeo por hardware es una de las mayores limitaciones que tienen actualmente los entornos virtualizados.
Aparentemente Kingston decidió que sus módulos debían ser juntados con un gran hardware. Por el lado de la tarjeta madre, recurrieron a una Gigabyte GA-EX58 UD5 (€240 aproximadamente), un procesador Core i7 920 y gráficos Nvidia que lamentablemente no fueron especificados. Si bien la memoria es DDR3, esto no quiere decir que la tecnología DDR2 se quede afuera. Ya existen módulos de 4 GB en DDR2, por lo que con un chipset adecuado y una actualización de BIOS es probable que unas cuantas tarjetas madre puedan aceptar módulos de 4 GB, especialmente si consideramos que cada vez hay más opciones combinando ranuras DDR2 y DDR3, para que el cambio de tecnología sea menos problemático. Con costos cada vez más reducidos, el sueño de un ordenador con cantidades enormes de RAM está cada vez más cerca, y puede que Kingston haya dado un paso importante con esta demostración.