El concepto de ordenador compacto ha llegado para quedarse, y a medida que se mejora la eficiencia, los fabricantes ofrecen a los usuarios una relación tamaño/rendimiento cada vez más atractiva. Los llamados «dongles HDMI» pagaron (en parte) el precio de ser productos de primera generación, pero hoy podemos encontrar alternativas muy interesantes, como por ejemplo el Kangaroo. A simple vista cualquiera podría confundirlo con un smartphone, sin embargo, en su interior hay un ordenador x86 completo que utiliza a Windows 10 como sistema operativo.
Mi ordenador principal de trabajo sigue siendo una torre tan alta como el escritorio, una carcasa que se encuentra vacía en su mayoría, pero que al mismo tiempo brinda amplio acceso a cualquier componente en caso de una falla (y las hay, créanme). Ante una reparación o un reemplazo definitivo, el proceso se reduce a extraer la pieza afectada y colocar una nueva, reduciendo al mínimo cualquier «downtime» indeseado. Aún así, semejante nivel de versatilidad resulta irrelevante para la mayoría de los usuarios, que harían todo lo posible para reemplazar a esa torre con un ordenador compacto. El uso de sistemas portátiles como PCs de escritorio, la llegada de los All-in-One, el desarrollo de la plataforma NUC de Intel y el avance de los dongles HDMI no hacen más que obedecer a esa tendencia, sin mencionar a los notables avances en rendimiento, consumo de energía y miniaturización.
De este modo llegamos a las puertas del Kangaroo, ordenador desarrollado por la gente de InFocus. El Kangaroo se perfila como el sistema portátil definitivo, una declaración respaldada por sus dimensiones (124 por 80.5 por 12.9 milímetros), que están a la par de cualquier smartphone o phablet. Su hardware se basa en el SoC Intel Atom x5-Z8500, pequeño demonio de la familia Cherry Trail con arquitectura Airmont. Este chip trabaja con una frecuencia base de 1.44 GHz, pero su modo Turbo roza los 2.24 GHz y posee cuatro núcleos en su interior. 2 GB de RAM, 32 GB de almacenamiento en estado sólido, ranura microSD de expansión, lector de huellas digitales, conectividad Bluetooth 4.0 y WiFi ac cierran la lista de especificaciones principales. El Kangaroo también entrega un dock que suma dos puertos USB de tamaño completo (2.0 y 3.0), y un puerto HDMI. El sistema operativo escogido para el Kangaroo es Windows 10 Home.
Es probable que el dock sea el aspecto más llamativo del Kangaroo además de su alto nivel de portabilidad, ya que nos permite utilizar cualquier pantalla compatible, y esto se extiende a dispositivos iOS, con la ayuda de la aplicación OSLinx. Finalmente, llegamos al precio: InFocus está pidiendo solamente 99 dólares por el Kangaroo, aunque el usuario deberá invertir algunos billetes extra por los cables USB y HDMI. En resumen, el Kangaroo es una excelente opción para aquellos que buscan terminales portátiles, sin tener que pagar una fortuna a cambio de los últimos híbridos.
