Una de las mejores selecciones de juegos de todas las que hemos tenido en esta sección. ¡Sin exagerar! Coaster Racer 2 es vértigo y velocidad, y está buenísimo. Totally Odd está hecho de plastilina y Number Ninja es uno de los juegos más originales del año (¡y tiene matemáticas ninja!). Los dos platos fuertes, sin embargo, son Snailiad, un Metroid con caracoles y Hammerin’ Harry, el clásico de las recreativas de los 90s. Let’s Get Busy!
Coaster Racer 2: Genial juego de carreras 3D, con gráficos tipo cel-shaded (historieta, bah), con todo lo necesario para cautivarte durante un par de horas. En Coaster Racer 2 corres arriba de montaña rusas, por el simple placer de sentir el vértigo y llenar de polvo el rostro de tus contrincantes. Son 10 circuitos, cada uno con un modo principal de carrera y dos retos para ganar dinero extra. ¿Y para qué quieres dinero extra? Para mejorar cualquiera de tus vehículos, por supuesto, sea tu coche o tu moto. Un juegazo rápido y furioso. Brrrrroooooommmmmm!
Totally Odd: Un juego de ingenio cuyo arte fue desarrollado completamente con plastilina, que tiene una calidad que supera hasta las expectativas más altas. Aquí eres un clon (desechable por completo), en lo que parece ser un experimento para ver cuántas habitaciones eres capaz de cruzar, solucionando los acertijos que te bloquean el camino. Todos los enigmas son lógicos, y pueden ser un desafio hasta para el más inteligente de nuestros lectores. Un juego totalmente raro y entretenido hecho con la textura de la infancia.
Number Ninjas: ¡Qué juego dificil de explicar! Tal vez por eso sea tan bueno y tan pero tan original. Number Ninjas es exactamente eso, un juego en el que los números son ninjas. ¿Y qué demonios quiere decir esto? ¡Que solo puedes actuar en relación a las matemáticas! Por ejemplo, si tienes 8 = 6 y coges un + deberás matar al 3, para luego matar al 1 con un -. Si entendiste lo que quise decir, te felicito. Probablemente no, pero no importa. ¡Todo será evidente una vez que te adentras al mundo de los números ninja!
Snailiad: Si te dicen que el juego de un caracol puede tener tanta acción, disparos y aventuras, no te lo crees. ¡Pero es cierto! Porque cuando los caracoles del pueblo comienzan a desaparecer uno tras otro, alguien tiene que investigar qué es lo que sucede. ¡Ese alguien es Snaily Snail! Y hacia la aventura te embarcas, explorando un mapa lleno de resquicios y puertas de colores, que solo pueden ser abiertas con un disparo del mismo color. Es que si bien Snailiad tiene personalidad propia, es innegable que toma prestadas muchísimas cosas de Metroid. ¡Y eso es muy bueno! Me encantó.
Hammerin’ Harry: No te das una idea lo contento que me puse cuando vi que este juego estaba para distribución. Hace muchos pero muchos años atrás, me pasé meses tratando de superar todas las pantallas de este clásico de recreativas con una sola moneda. Yo tendría unos 11 años cuando lo vi por primera vez y fue amor a primera vista. Ese Let’s Get Busy! todavía me transporta a las calurosas tardes de verano, en vacaciones, en las que me encerraba en los salones de recreativas a jugar este y otros clásicos como Toki y Snow Bros.: Nick & Tom. Ah, ¿de qué es el juego? De un luchador con su confiable martillo, que va despachando a todos los malos de turno, jefes de final de nivel incluidos. Un clásico que derrama nostalgia por todos sus poros virtuales. ¡Lo mejor de la semana!
