Comenzó 2011 y todo parece más o menos tranquilo. Nadie está al 100% todavía, es cierto, pero eso sucede más o menos en marzo. Necesitamos todo ese tiempo para sacudirnos las lagañas y estirar los brazos. Seguro que estás en modo pereza, así que vaya un menú suavecito pero nutricional: Bat Country, Crystal Runner, Liquid Measure 2 – Dark Fluid, Color Carnage y Brain Racer. ¡A jugar!
Bat Country: Cualquier juego que comience con la frase: “Parecen murciélagos gigantes, señor” y termine en una batalla épica en el estómago de un tiburón gigante, merece toda tu atención. En la superficie Bat Country no es más que un juego de navecitas, pero es en extremo creativo y nos introduce en situaciones extrañas pero simplemente asombrosas. Es cortito, y parece una mini película. Disfrútalo.
Crystal Runner: Crystal Runner es como un juego de laberintos. Tú eres un tipito, y debes llegar hasta el barco y escapar de la isla. El problema es que el laberinto está lleno de peligros y desafíos mentales; y lo ideal es siempre coger todo el botín antes de llegar a la salida. ¿Qué clase de pirata serías, sino? Porque eso es lo que creo que eres en Crystal Runner, un pirata que explora cuevas en busca de tesoros. Argh! Como sea, no jueges CR solo para superarlo porque no es el caso. La idea es terminar los niveles en el menor tiempo, con el mayor puntaje posible.
Liquid Measure 2 – Dark Fluid: A mi estos juegos me ponen loco. Porque sacan lo tonto que hay en mi, y a veces “me se traba” el cerebro y me cuesta solucionar cosas que deberían haber sido evidente. Me enojo, pero supongo que de eso se trata. Y si de eso se trata, esta expansión del rompedero de cabezas que fue Liquid Measure 2, da en la talla y mucho más. Es que al ser una expansión con niveles pensados por los jugadores, se supone que ya eres un experto en el tema. Por eso, la curva de aprendizaje aquí es altísima. Si no lo conoces, y quieres empezar de abajo, comienza aquí.
Color Carnage: Estamos con juegos más o menos simples. No le pidas demasiado a la humanidad a seis días de comenzado el año. Todavía estamos sacudiéndonos la resaca. Aún así, no se puede negar que, aunque simple, Color Carnage es pura adicción. La premisa es sencillísima: debes sobrevivir todo lo posible, disparando rayitos de los ojos contra las personitas voladores. Si los hombrecitos te tocan, mueres. Si quedas enterrado en la pila de cadáveres, mueres. Usar la palabra cadáver es demasiado cruento, porque lo cierto es que la masacre es de todos los colores. Hete ahí el título.
Brain Racer: Parece así como una tontería, pero este juego de sumas, restas, divisiones y multiplicaciones nos ayuda a hacer un poco de gimnasia a los que, como yo, solo hacemos cálculos con la calculadora del PC. Los matemáticos entre la audiencia de NeoTeo serán artistas olímpicos en Brain Racer. Yo me desempeñé más o menos bien, pero no paso de una liga barrial. Sí, apesto en matemáticas.
Lo dicho. Suavecito.