Tenemos bicicletas eléctricas, y vehículos todoterreno que pueden moverse en el agua como si fueran botes. ¿Qué otra combinación hay en el mercado? JetSurf es una tabla de surf con un motor de dos tiempos integrado, capaz de alcanzar una velocidad máxima de 56 kilómetros por hora. No importa qué tan tranquilo se encuentre el océano, lo único que debe hacer el piloto de una JetSurf, es acelerar.
La posibilidad de subirse a una tabla de surf (por más remota que parezca) siempre está flotando en alguna parte, y más allá de los límites económicos, tal vez la región en la que nos encontramos simplemente no tiene las olas necesarias, porque al final, chapotear acostados sobre la tabla no es hacer surf. Como nadie tiene la capacidad de ordenarle al viento y al océano cuándo hacer olas, las opciones son ir en busca de ellas a ciertas regiones, visitar lugares especiales como Wavegarden con olas artificiales, u olvidarse de las olas y moverse sobre el agua a toda velocidad. Tal vez ese último punto sea más parecido a realizar esquí acuático, pero una tabla de surf motorizada como la JetSurf nos obliga a pensar un poco más esa comparación.
La JetSurf está disponible en tres modelos: Pro Race, Ultra Sport y Factory, cuyas diferencias principales se encuentran en el diseño y la capacidad del motor (la Ultra Sport tiene un motor de 86 centímetros cúbicos, mientras que las otras dos poseen uno de 100cc, y el modelo Pro Race utiliza un carburador optimizado). Después comparten varios aspectos, como el tamaño (180 por 60 por 15 centímetros), la capacidad del tanque de combustible (2,5 litros), el peso (entre 14 y 15 kilogramos, listas para usar), y la autonomía (cuatro horas, aunque depende del consumo).
En los tres modelos de JetSurf, la velocidad máxima no supera los 56 kilómetros por hora, un número que de todos modos es bastante respetable, y que probablemente demande un poco de entrenamiento previo para no romperse el cuello. El sitio oficial no revela ningún detalle sobre el precio de las tablas JetSurf, pero una búsqueda rápida en la Web apunta a unos escalofriantes 16 mil dólares. Si por ese precio estás pensando en algo como un par de jet-skis, debes saber que no eres el único, aunque por otro lado, no es lo mismo subirse al equivalente a una motocicleta en el agua, que andar en una tabla de surf a una velocidad similar…