En muchas ocasiones hemos compartido nuestra opinión sobre los jetpacks propulsados por agua. Y aunque no nos tienta la idea de utilizarlos, apoyamos la iniciativa y queremos ver cómo salen disparados por los aires los que estén lo suficiente locos como para probarlos. Este nuevo modelo llamado Jetlev está finalizando las pruebas para comenzar a producirse en cantidades limitadas y costará cerca de €99.000.
Hemos hablado en muchas ocasiones de este tipo de inventos que sirven para lograr dos cosas: primero, salir volando como un lunático y segundo, para romperte todos los huesos del cuerpo. Pero que nosotros no queramos usarlos, no quiere decir que no queramos ver a alguien probarlos. Si hay algo que nos ha enseñado la experiencia, es que los lunáticos no solo son bastante inventivos, sino también, muy queribles.
Como dijimos, ya hemos hablado de este curioso jetpack que funciona con agua. Una de las mayores diferencias con intentos anteriores y otro tipo de propulsores, es que han encontrado una manera de nivelar lo mejor posible el empuje de la propulsión con el que peso que carga. Esto lo hicieron ubicando el propulsor, la gasolina y equipos relacionados en un compartimiento separado, ubicado en la parte trasera del jetpack.
Además, el hecho de que sea propulsado por agua lo hace mucho más seguro, porque puede ejercer mucha más fuerza en menos velocidad. Eso quiere decir que puedes elevarte sin salir volando al infinito y más allá. Jetlev está integrado con sistemas de estabilidad que mantienen al piloto en una posición erguida y que vuelve a una posición centrada automáticamente.
Como dijimos este jetpack se propulsa por agua y para lograrlo esta complementado con una larga manguera que se sumerge varios metros dentro de un cuerpo líquido. Esta manguera ofrece un suministro flexible de agua a presión y también actúa como un estabilizador y evita vibraciones.
Tal como dijimos los primeros modelos están finalizando las pruebas, pero la empresa alemana estará tomando ordenes para el modelo de 155HP desde abril de este año. Para quien se esté relamiendo con la idea de volar por los cielos, para luego estrellarse contra el agua, déjennos pincharles la ilusión diciéndoles que el volumen de producción será limitado y costará alrededor de €99.000.