El ministro de comunicaciones japonés, Yoshihide Suga, ha dicho que Japón comenzará a desarrollar una nueva tecnología cuyo objetivo último es el reemplazo total de Internet. Según Suga, estaría disponible en 2020 y sería mucho más segura y confiable.
Yoshihide Suga se encuentra de visita en Brasil, país desde el que ha hecho una declaración que ha dado la vuelta al mundo rápidamente, gracias a la tecnología que en la declaración del ministro se pretende reemplazar.
Según Suga , Japón se encuentra trabajando en el desarrollo de una tecnología que será capaz de transmitir datos a una velocidad mucho mayor a la actual Internet, además de proporcionar una mayor seguridad, protección contra fallas y ataques de virus.
El ministro expresó su deseo de que Japón sea el líder en el desarrollo de esta tecnología, a la que se refirió como “Post-Internet”. La idea de Japón es que rápidamente se transforme en un nuevo estándar mundial.
La actual Internet ya tiene décadas funcionando, y en la actualidad se emplea para la transmisión de audio, video, juegos online y muchas tareas más que ni siquiera podían imaginarse cuando se definieron sus características. Esto ha hecho que surjan problemas de seguridad o de velocidad, debidos a su estructura poco adecuada para algunos tipos de datos.
En lugar de seguir cargando las espaldas de una tecnología que ya es anticuada, Japón ha decidido cambiar de paradigma. Semejante cambio requiere de la cooperación entre los empresarios, las universidades y el gobierno. Suga cree que la nueva red puede estar disponible comercialmente antes del año 2020.
El ministro Suga espera que Japón sea el líder en el desarrollo de la tecnología post Internet y el que establezca los estándares. Esto no es algo menor, ya que esa posición permitiría a las compañías japonesas aumentar su competitividad en el mercado del software y hardware del futuro.
Por supuesto, aun es muy pronto para conocer las características técnicas de dicha red “Post-Internet” o si será algún estándar abierto o propietario. Lo que sí está más que claro es que los japoneses disponen de una estrategia a futuro perfectamente planificada.