Ya sea por un problema técnico o por deseo de su desarrollador, hay aplicaciones que se resisten con uñas y dientes al proceso estándar de desinstalación bajo Windows. En esos casos, no hay excusa que valga: El usuario está en control del software en su sistema, y si quiere borrarlo, lo hará. Para purgar programas testarudos y otras variantes, nada mejor que la más reciente versión de IOBit Uninstaller.
A todos nos gustaría pensar que se trata de un problema enterrado en el pasado, pero lo cierto es que muchos desinstaladores siguen quebrándose, dejando rastros a través de todo el sistema operativo. Durante años, Revo Uninstaller mantuvo su posición como herramienta por excelencia en la desinstalación de programas, sin embargo, la ausencia de soporte para aplicaciones de 64 bits en la edición gratuita ha provocado que muchos usuarios decidan buscar otras opciones. ¿Por qué tomarse la molestia de desinstalar a fondo un programa? Bueno… ¿por qué no? Si lo queremos fuera del ordenador, eso significa que ya no tenemos necesidad de él, y no tiene ninguna razón (más allá de la opinión del desarrollador) para dejar archivos de configuración y bibliotecas abandonadas en una carpeta oscura.
Una de las mejores alternativas, y probablemente una de las más recientes, es IOBit Uninstaller 4. Esta nueva entrega de IOBit no tiene problemas al detectar programas de 32 y 64 bits, pero también cuenta con una sección dedicada que reporta cada plugin y cada extensión presente en nuestras instalaciones de Firefox, Google Chrome e Internet Explorer. IOBit Uninstaller 4 utiliza un “ranking” generado por los usuarios para establecer si una extensión es confiable, o si se trata de algún módulo nefasto con intenciones maliciosas. Regresando a la sección de software, IOBit Uninstaller 4 intentará utilizar en primer lugar al desinstalador integrado, y luego ofrecerá la opción de un escaneo más profundo, capaz de detectar archivos y carpetas huérfanas.
El instalador oficial de IOBit Uninstaller 4 apenas supera los dieciséis megabytes, y de acuerdo al sitio oficial, Windows 2000 es el sistema mínimo soportado, por lo tanto aquellos jinetes que todavía desafían al paso del tiempo con Windows XP tienen acceso a un sólido desinstalador. El programa atravesó una buena parte del mes de septiembre como beta, pero hoy ya podemos descargar al build 4.0.4, que en nuestras pruebas sobre dos ordenadores diferentes ha demostrado ser muy estable.