Internet es una herramienta extraordinaria, pero su disponibilidad en algunas regiones deja mucho que desear. Desde la falta de infraestructura hasta la clásica censura, hay millones de personas allá afuera que no pueden acceder a recursos básicos de conectividad. Por suerte, el proyecto Internet en una Caja (Internet-in-a-Box) nos permite crear «hotspots de aprendizaje» usando un Raspberry Pi u otro equipo basado en Linux, cargados con el mejor contenido open source y gratuito que la red tiene para ofrecer.
A principios de 2015 hablamos sobre el Paquete Semanal, una colección de material digital que se distribuye en territorio cubano como «reemplazo» de la Internet tradicional. En esencia, se trata de uno de los principales ejemplos de sneakernet en el mundo: Si la infraestructura no existe o el costo del ancho de banda es demasiado alto, la solución más efectiva es compartir datos y moverlos físicamente.
Sin embargo, el proyecto Internet en una Caja (Internet-in-a-Box) nos ofrece una especie de término medio. En vez de duplicar discos y pendrives, su estrategia es crear un mini servidor offline completamente cargado con información, que a la vez funciona como hotspot. De esta forma, todos aquellos con un dispositivo que soporte WiFi pueden conectarse a Internet in a Box directamente, sin descargar ni transferir nada.
Cómo instalar Internet en una Caja
Las rutas de instalación que ofrece Internet en una Caja son dos. La primera es una imagen compatible con Raspberry Pi. La wiki recomienda usar Raspberry Pi Imager y agregar el repositorio de Internet en una Caja manualmente para que aparezca en la lista de opciones. La imagen está disponible en tres ediciones: Medium con escritorio (el .img es de 12 GB), Small (.img de 7.1 GB), y Medical (.img de 4.9 GB). Dependiendo del modelo de Raspberry Pi, Internet en una Caja soporta entre 10 y 32 clientes simultáneos.
La segunda es usar un entorno Linux basado en Debian. Si se trata de Ubuntu 22.04+, Linux Mint 21+ o Debian 11+, los desarrolladores ofrecen un comando de instalación único, «curl iiab.io/install.txt | bash». En todos los casos, Internet en una Caja recomienda usar una conexión Ethernet durante esta fase, y evitar un enlace WiFi a 5 GHz para no afectar la compatibilidad de equipos más antiguos.
Para finalizar, la mejor forma de experimentar Internet en una Caja es con sus demos en línea (o sea, lo que ve cada usuario cuando se conecta al hotspot), y una de ellas proviene de México. Su página oficial presenta contenido de Khan Academy, Wikipedia, OpenStreetMap, PhET, Wiktionario y Wikiquote, educaLAB, WikiHow, Project Gutenberg, y mucho más. Tal vez Internet en una Caja no sea una solución ideal, pero si la conectividad brilla por su ausencia, tenemos una alternativa muy sólida aquí.
Sitio oficial: Haz clic aquí
Demo en línea: Haz clic aquí
A ver, si a Internet que quitas los videos de chicas que viven a 5 minutos de tu casa, los videos de gatitos, los memes, Feisbuck y tal, lo mismo todo internet te cabe en un disco de 3″ 1/2.
Lo malo es que no le interesaría a nadie.
Me recuerda a un viejo proyecto que anduvo circulando un tiempo (creo que todavía existe aunque el desarrollador nunca más las mejoró) de las Piratebox, que eran pequeños puntos de wifi autocontenidos que no tenían conexión a internet (aunque se podía gestionar una) e incluían un chat y foros y dependiendo de su capacidad, un servidor de archivos. Todavía tengo una de esas ensamblada con una Raspberry.