Ayer mencionamos en el artículo sobre los nuevos productos de SanDisk que la gente de Intel se encontraba desarrollando su keynote en la edición 2015 de COMPUTEX. Bien, una de las cosas más importantes que salió de allí es el anuncio de la interfaz Thunderbolt 3. Además de incrementar la velocidad y reducir el consumo de energía, Thunderbolt 3 utilizará el conector físico USB Tipo-C, un paso enorme hacia la unificación de estándares y la reducción en el costo de cables y accesorios.
Una historia que no muchos conocen involucra a Intel y los encargados del estándar USB. Antes de que el gigante de Santa Clara anunciara a Thunderbolt, la idea era que la nueva interfaz utilizara puertos físicos USB, pero el USB Consortium la derribó, y como alternativa, Intel implementó el puerto Mini DisplayPort. Cuatro años después, el panorama ha cambiado por completo. Tanto USB 3.1 como el USB Tipo-C colocaron sobre la mesa múltiples beneficios, y el plan para desarrollar una interfaz multi-protocolo se manifestó casi de inmediato. De ese modo, Intel confirmó durante su presentación en la convención COMPUTEX 2015 que la tercera generación de Thunderbolt utilizará el conector USB Tipo-C reversible, con opciones para cables pasivos de 20 gigabits por segundo, y cables activos que duplicarán esa velocidad.
Esto es posible gracias al «modo alternativo» en el USB Tipo-C. El modo coloca a disposición de los fabricantes la habilidad de transportar otros protocolos que podrán estar o no acompañados por datos provenientes de USB. El matrimonio entre Thunderbolt 3 y el USB Tipo-C dará lugar a beneficios tangibles como un ancho de banda de 40 gigabits por segundo, la conexión de dos pantallas 4K en simultáneo, y soporte de hasta 100 vatios en la recarga de dispositivos (se calcula que varias compañías podrán reemplazar fuentes de alimentación con cables activos). Los nuevos recursos también implican la creación de un nuevo controlador, Alpine Ridge, el cual incluirá soporte USB 3.1 y permitirá (por ejemplo) que un monitor Thunderbolt sea equipado con puertos USB 3.1.
Como si eso fuera poco, hay más buenas noticias para los entusiastas del hardware: Thunderbolt 3 finalmente le dará luz verde a las tarjetas gráficas externas. Hasta aquí, todas las soluciones habían sido desarrolladas por terceros, y la compatibilidad era muy limitada, pero Intel logró resolver dos detalles técnicos críticos: El «hot-plug» y la desconexión sorpresiva de las tarjetas gráficas. En otras palabras, hasta el más humilde de los sistemas con Thunderbolt 3 podrá ejecutar títulos de última generación utilizando un GPU externo. Thunderbolt 3 también extiende el soporte en la emulación Ethernet 10Gig, y habrá toda una serie de adaptadores para que los dispositivos Thunderbolt actuales funcionen correctamente con la nueva versión. La producción comenzará a fin de año, y la mayoría de los productos llegarán a las estanterías en 2016. Damas y caballeros, no me quiero adelantar, pero de acuerdo a esta información, Thunderbolt 3 está muy cerca de ser una interfaz casi perfecta. Espero que así sea.