No es necesario recordar que estamos de paso en este mundo más allá de nuestras creencias personales y del avance registrado por la ciencia y la medicina, pero con la inclusión de las redes sociales, la muerte ha ingresado en una dimensión diferente. ¿Qué efecto causa encontrar en línea el perfil de alguien que sabemos que falleció? ¿Qué es lo que deben hacer los encargados de las redes sociales con esos perfiles? Y lo más importante, ¿qué es lo que deja atrás el fallecido? ¿Cuál es su mensaje en sus últimos momentos para los que quedan atrás? Si alguna vez te has preguntado esto, y decides que quieres realizar un testimonio a través de Facebook en caso de que algo te suceda, necesitas dar un vistazo a If I Die.
Es una pregunta bastante compleja, porque en general todo aquello relacionado con la muerte se vuelve complejo en nuestras mentes, aún cuando en realidad puede ser bastante simple. ¿Qué hacemos con aquello que dejan atrás los que se van de esta vida? No me refiero a los bienes materiales (ya sabemos muy bien que las sucesiones y los testamentos pueden convertirse en una carnicería) sino a lo sentimental. La muerte puede llegar en cualquier momento, bajo cualquier circunstancia. Algunos tienen avisos, otros pueden incluso escoger la forma de enfrentarla, pero una vez que llega, el tiempo se agota. No hay segundas oportunidades. Todo que faltaba por hacer o por decir simplemente se pierde, aunque quedan rastros, no solo en nuestras mentes y nuestros corazones, sino también a través de la tecnología. La llegada de Facebook y las redes sociales presentan a la muerte desde otro ángulo ya que, tal y como lo explicó Tomás en este artículo, un ordenador no puede saber si el dueño de un perfil ha fallecido.
Así es como encontramos perfiles de personas que ya se han ido. Todos sus mensajes, sus imágenes y sus enlaces, eternizados en la frialdad de los bytes. Muchos prefieren expresarse por fuera de los ordenadores. Otros luchan hasta el último minuto para dejar todos sus asuntos en orden. Y ahora, aparece esta aplicación llamada If I Die. A simple vista es una aplicación para Facebook, pero en realidad es una última oportunidad, una forma de utilizar a la red social para que tu partida no quede simbolizada solamente por un perfil semivacío.
Tras instalar If I Die, puedes grabar un mensaje a través de una webcam, o simplemente escribir un texto, que por supuesto puede ser lo que sea. Y luego, deberás escoger a tres amigos de confianza, que tendrán la dura tarea de confirmar tu muerte. Sólo puedo limitarme a reconocer la existencia de la aplicación, pero no puedo decir si es adecuada o no, porque creo que toca un punto muy personal. No todos consideramos a la muerte de la misma forma, y el hecho de que decidas utilizar a la tecnología (Facebook en este caso) para anunciar tu última voluntad dependerá exclusivamente de ti.