Desde hace tiempo sabemos que la interferencia de un horno de microondas puede afectar el rendimiento de cualquier red inalámbrica cercana que utilice la banda de 2.4 GHz. Si bien los hornos salen de fábrica con un blindaje importante, un router mal ubicado termina sufriendo cada vez que decidimos calentar o descongelar algo. El youtuber Jessie Carabajal nos ayuda a visualizar el deterioro en la conexión WiFi con una unidad de diagnóstico, y la pérdida de velocidad en tiempo real.
¿Tienes problemas con tu WiFi? Antes de gastar dinero, primero debes hacer lo más sencillo del mundo: Encontrar un nuevo lugar para el router. No es un invento nuestro, y llevamos años hablando de eso. Pero la posición es apenas una parte de la larga ecuación inalámbrica. Las interferencias están a la orden del día, y un cambio de canal podría eliminar el problema de raíz, sin embargo, no son exclusivamente externas. Hay un rival escondido en tu cocina que puede arruinar la fiesta cada vez que se enciende, y al que muchos ignoran. Por supuesto, me refiero al horno de microondas.
En la última semana, el youtuber Jessie Carabajal realizó varios experimentos usando un sistema de diagnóstico Ekahau Sidekick (3.300 dólares sólo por el hardware). Su prueba inicial se concentra en los efectos de un horno de microondas encendido sin nada en su interior, y de inmediato podemos observar cómo la interferencia se dispara. Además, en la terminal vemos que la velocidad cae de 40-50 megabits por segundo a 0-6 megabytes por segundo en el peor de los casos.
Ahora, lo cierto es que dicha prueba presenta una validez limitada, porque no tiene sentido usar un horno de microondas vacío. Por ese motivo (y el reclamo de algunos usuarios), Jessie repitió el test calentando un tazón de agua. El segundo vídeo enseña que buena parte de la energía está siendo absorbida por el líquido, y que los niveles de interferencia son menores. Al alejar su ordenador unos tres o cuatro metros del horno de microondas, el ruido cae a niveles «manejables» por así decirlo. Este vídeo también incluye mediciones para Bluetooth, pero no son tan severas.
En resumen, la solución es mantener una distancia saludable entre el horno de microondas, el router, y los dispositivos móviles. Otra opción es cambiar el router por una unidad compatible con 5 GHz, pero si puedes eliminar (o reducir) interferencias a costo cero, bienvenido sea. En lo personal sigo dependiendo de un WRT54G modificado hasta el cansancio, y no se moverá de su lugar hasta que termine destruido…