Era de suponer que en el marco del Optical Fiber Communication Conference la conexión entre los asistentes y los presentadores iba a ser bastante rápida, pero por el momento la única velocidad de la que se está hablando es la del Holey Optochip. Este microchip desarrollado por IBM exhibe una tasa de transferencia máxima que oscila el billón de bits por segundo. Este tipo de tecnología que podría implementarse en 2020, te permitiría, por ejemplo, descargarte 500 películas HD en un segundo. ¿Tienes espacio suficiente?
Está discutida y por supuesto siempre a prueba, pero la tecnología óptica se planta como la cara más bonita a la cual dirigirse en la próxima década. Tanto como soporte alternativo, tanto como oposición a los semiconductores y circuitos, los fotónicos u ópticos integrados están viviendo un presente que les da participación en una industria que innova mucho, pero que ya no pierde tiempo con modelos que no prometen nada. IBM está en esto desde hace años, y se puede recordar cuando en 2007 se presentó, en la misma conferencia, un prototipo de chip ultraveloz que rondaba los 160 gigabits por segundo (160.000.000 bits). El tiempo pasó y se ve que en IBM no estuvieron perdiendo el tiempo, pues el chipset óptico más rápido del mundo es ahora de 1 billón de datos por segundo. Es decir, 1 000 000 000 000 de bits por segundo.
Como en desarrollos anteriores, la gente de IBM volvió a basar su invención en los semiconductores CMOS que, famosos por su bajo costo en lo que hace a la producción masiva y en su conocida eficiencia, sirvieron esta vez como modelos base para probar una nueva forma de generar más comunicaciones en menos espacio. Para esto, los ingenieros de IBM agarraron el taladro en miniatura y le hicieron 48 microagujeros al chip, en los que ubicaron más tarde 24 transceptores ópticos. De esta manera, con un sistema de 24 emisores y 24 receptores trabajando en conjunto, pudieron añadir 24 comunicaciones de doble dirección al modelo para que trabajen en forma simultánea. Para tener una idea de lo pequeños de los microagujeros, esperamos que las medidas del chip, que son 5.8mm y 5.2mm, te digan algo.
No sólo la velocidad es un baluarte de este nuevo chip, sino también su eficiencia y consumo, pues menos de 5 vatios son apenas un doceavo de un bombilla casera de 60. Esto, trasladado a servidores imponentes como los de los centros de información de Google, Amazon y otras compañías, podría resultar en un gran ahorro y por ello son las más interesadas en la implementación temprana de esta tecnología. Claro que a nivel tecnología de consumo masivo, esto no lo veremos ni en sueño hasta aproximadamente 2020. Esto es, al menos, lo que ha indicado IBM cuando hizo la presentación del Holey Optochip. Un chip que –tengo que repetirlo porque todavía no me lo creo- puede descargar 1 billón de bits por segundo.