La lista de capacidades de los robots se puede enunciar en un listado bastante amplio, pero gracias a la inversión que se ejecuta en la robótica, esta lista está siempre en constante crecimiento. A veces con nimiedades y otras menos con revelaciones importantes, como la de Hiro, un robot japonés que no sólo aprende, sino que también recuerda, piensa y se adapta de manera autónoma a nuevas situaciones para resolver problemas. Si tiene la información la usa, y si no; la busca.
Que hoy por hoy un robot aprenda nuevas actividades no sorprendería ni al más desactualizado de los geeks, pues demostraciones de esto hemos tenido suficientes como para dejarnos marcados sobre la potencialidad que tienen estos entes electrónicos de pegarnos alguna paliza física en el futuro, aunque ahora ya nos lastimen intelectualmente siendo más digamos… propensos a resolver cálculos que nosotros. Sin embargo y ante todo lo alcanzado hasta ahora en el ámbito de la autonomía, el trazado de la aventura robótica todavía puede darnos algunos asombros periódicamente, y uno de ellos lo protagoniza el nuevo robot HIRO, que está diseñado para no sólo aprender, sino también adaptarse a nuevas situaciones de manera autónoma y sin depender -y esto te va a doler un poquito- de ti, humano.
Hiro es un invento del siempre prolífico Tokyo Institute of Technology, que se ha hecho con alguno miles de dólares de financiación para crear a este robot que impresiona por su capacidad de replicar, a su manera, la actividad que viene llevando el humano y el resto de las especies durante millones de años: adaptación. En la ciencia no hay magia por más varitas de acero que se agiten, por lo que la razón para que este robot evolutivo haga tal cosa es el uso de un algoritmo de auto organización de incrementación de redes neuronales (SOINN). Este tipo de estructuración le permite auto adaptarse por aprendizaje a las nuevas situaciones a las que se enfrenta recordando acciones pasadas (lo que es decir, asociando experiencias grabadas en sus redes neuronales), para resolver situaciones nuevas basadas en similitudes. También se le puede enseñar tareas específicas, pero Hiro siempre actuará leyendo qué es lo que pasa a su alrededor a través de un sistema de audio y video.
Hasta aquí Hiro representa un interesante avance en la autonomía robótica, pero cuando a este robot que piensa y se adapta se le da una conexión a la red, las capacidades de resolución de problemas crecen considerablemente. ¿Por qué? Porque el robot Hiro accede a una base de datos futura o de otras fuentes por ahora, para darle solución a los conflictos que lo aquejen luego de analizar la situación ante la que se encuentra. De esta forma, Hiro se mete a navegar la red por su cuenta o incluso se comunica con otros robots (no se especifica distancia ni medio necesario) para acceder a su algoritmo SOINN y usar la información que estos han recopilado sobre la resolución de problemas en su experiencia. Tal y como los humanos y todo el sistema educativo de todos los tiempos. Así que si tu robot aprende individualmente a emanciparse de ti y sienta las bases de una revolución, millones también podrán hacerlo. Wow. O mejor dicho, brrrr.
Cuando su algoritmo le diga que la mejor forma de preparar la bebida es matando a todos los humanos que estamos cerca, va a ser nuestro fin.
Yo opino que los próximos robots mata humanos los envien a somalia, esa pobre gente no tiene nada, ni oportunidades para trabajar así sea preparando bebidas.
Audio y video… aprendera a decir malas palabras y si una pelicula p…. xD pero hay que aceptar el avance, este robot puede ser que prepare el desayuno en la mañana.
A ver cuando aprende cosas utiles no? jaja
Lo que no vi es como aprende solo?? mostraron q repetia algo nomas, no q aprendia del entorno, lo q pienso es q no se si esta bien encarado asi, nosotros no aprendemos asi, de chicos aprendemos a copiar lo q hacen nuestros padres y aplicamos eso en el entorno, para mi deberia venir por ese lado, el robot deberia copiar lo q hacen los ingenieros y despues repetirlo e ir intentando cosas mas grandes
Hace como 12 años que los avances en robótica me producen sentimientos encontrados. Esto se debe al sabor de boca que me dejó una visita a unos laboratorios a las afueras de Barcelona. El nivel de automatización de la planta era para la época muy avanzado. Pero en seguida notabas que la plantilla de trabajadores era minúscula en relación al enorme tamaño de la planta. Estaba prácticamente desierta, y es indescriptible la sensación que producía caminar por sus inmensos pasillos y múltiples controles de zona, sin cruzarte casi con nadie, a excepción de los robots.
Naturalmente se pasaron toda la visita contando sus bondades en términos de productividad, tasa de errores, eficiencia energética, reducción de costes y un largo etcétera. Aunque si se piensa en lo vacío que estaba todo y te ponías en el lugar de los pocos que aún trabajaban allí, el panorama no era tan "guay".
Por aquellos días esa planta era casi una excepción en el sector, pero hoy es la norma y se extiende imparablemente por todo el mundo. Para ejemplo, baste el millón de robots que en tres años tiene previstos Foxconn para reemplazar a sus trabajadores en las plantas de montaje chinas, en lugar de responder a las mejores condiciones laborales exigidas por los trabajadores.
A quien interese, dejo un video de "FRIDA" el robot en cuestión de la empresa ABB.
http://www.youtube.com/watch?v=70V6J4Y8hnc