Lisandro Pardo
Todo proyecto de electrónica necesita pasar por una fase de prototipos, y ahí es cuando el clásico protoboard (léase breadboard, plugboard, o «placa de pruebas») sale al rescate. Sin embargo, el protoboard no puede trabajar con componentes de superficie (salvo que se utilicen headers, breakouts o algo parecido), y llega un momento en el que tanto laberinto de cables, puentes y conexiones inestables confunden a cualquiera. La iniciativa Hexabitz busca presentar una nueva alternativa en electrónica modular, basada en pequeños hexágonos fáciles de conectar, que al mismo tiempo habilitan diseños tridimensionales.
Se acerca el fin de semana. ¿Qué sigue en tu lista de proyectos? ¿Hackear una consola? ¿Cambiar capacitores? ¿Restaurar una vieja radio? Siempre hay algo para hacer, y la mejor parte es que no necesitamos hacer un agujero en nuestro presupuesto. Recientemente hemos hablado mucho sobre el Raspberry Pi. Las unidades Zero son bastante accesibles, y una simple instalación de RetroPie para recordar a viejos clásicos te mantendrá ocupado durante horas. Quienes prefieran una sesión de electrónica más «pura y dura» por así decirlo tomarán a sus protoboards y comenzarán a diseñar, duplicar u optimizar circuitos, pero existen otras formas de crear prototipos. No todas fueron exitosas, y algunas mordieron el polvo antes de tiempo. Dicho eso, la pregunta es: ¿Qué tan cómodo te sentirías trabajando con hexágonos?
Esa es la oferta de Hexabitz, pequeños hexágonos (que pueden ser otros polígonos también) repletos de componentes conectados entre sí con puentes de estaño o pines soldados de forma directa. Todos los módulos están equipados con un microcontrolador STM32 que sirve para identificar a los hexágonos y anunciar su función, lo que permite a su vez crear una especie de red y establecer cierto grado de paralelismo en la ejecución de tareas. Obviamente, cada hexágono puede ser utilizado de modo independiente, ingresando a sus funciones con una consola de comandos a través de un ordenador, o usando botones e interruptores.
En lo personal creo que es inevitable sentir dudas sobre los puentes hecho de estaño, pero son dentro de todo un compromiso aceptable siempre y cuando se limiten a prototipos. Y hablando de prototipos, el propio proyecto Hexabitz se encuentra en alfa, y sólo 14 módulos se encuentran a la venta, con precios que definitivamente necesitan mejorar. Otro aspecto muy positivo para Hexabitz sería acercar posiciones con los sistemas Arduino y Raspberry Pi. Estaremos vigilando.
