Un youtuber chino cae al vacío. Otro genio intergaláctico pega su cabeza a un microondas y casi termina aplastado por el cemento rápido. Likes, views, la dosis diaria. Algunas personas no saben cuándo parar. La búsqueda de la selfie perfecta sigue una línea similar. Un reciente estudio del Instituto All India de Ciencias Médicas revela nuevos datos: Entre octubre de 2011 y noviembre de 2017 se registraron 259 muertes en 137 incidentes por selfies que incluyen ahogamiento, caídas, transporte, armas de fuego y electrocución. ¿Qué nos pasa?
Caras de pato. Innumerables espejos de baño. Platos de comida sin tocar. En cualquier momento y lugar. Los miembros de la «generación smartphone» están completamente obsesionados con tomar fotografías, en especial si son de ellos mismos. ¿Qué se busca con las selfies? Gratificación instantánea, reconocimiento, corazones y Me Gusta. Si bien uno puede entender por qué insisten en absorber esos pequeños choques de dopamina, es sencillamente absurdo que las selfies se hayan transformado en una actividad de riesgo. ¿Difícil de creer? En realidad ya hemos hablado sobre estadísticas de muertes vinculadas a selfies, pero un estudio del Instituto All India de Ciencias Médicas no hace más que expandir aquellos datos.
Selfies, con mortalidad en ascenso
Las selfies causaron alrededor del mundo un total de 259 muertes reportadas entre octubre de 2011 y noviembre de 2017, divididas en 137 incidentes. El número aumentó drásticamente durante los dos últimos años de la medición, con la pérdida de 98 vidas en 2016, y 93 en 2017. Otro aspecto para destacar es que el 72.5 por ciento de los fallecidos fueron hombres, lo que confirma la tendencia del grupo masculino a buscar selfies más extremas. 70 de las muertes estuvieron relacionadas a ahogamiento, 51 a incidentes de transporte (por ejemplo, pararse en las vías del tren), 48 a caídas, y 48 a incendios. Desde el punto de vista geográfico, India lidera la lista con 159 muertes, seguida por Rusia con 16, y Estados Unidos con 14.
Aún peor es el factor de la edad. 106 de los fallecidos tenían entre 20 y 29 años, y 76 pertenecen a la franja de los 10 a los 19 años. Ahora, el problema no es la selfie en sí, porque existen otras cosas que matan a más personas por año (abejas y avispas combinadas reclaman 58 vidas anuales en promedio), sino que la gente insiste en correr riesgos inaceptables para que esa foto quede perfecta en las redes sociales. Las autoridades indias creen que los números son todavía mayores (por deficiencias en los reportes), y no han dudado en declarar a las selfies como una crisis de salud pública. ¿Soluciones? Prohibir activamente a las selfies en las zonas más peligrosas, y seguir educando a través de campañas especiales.
