La novedad nos lleva a julio del año 2011, época en la que Microsoft lanzó una pequeña campaña publicitaria llamada «The G-mailman». Básicamente, lo que criticaba Redmond era que Google leía los correos de sus usuarios en Gmail para personalizar resultados de publicidad. Esa lectura sigue en actividad incluso hoy, pero a través de un breve comunicado, el gigante de Mountain View confirmó que será deshabilitada antes de fin de año. Por supuesto, la publicidad general en el servicio no va a desaparecer, y la personalización dependerá de otros parámetros.
La frase dice que «si no pagas por algo, eres el producto». En más de una oportunidad se dudó de su validez, sin embargo, en lo que se refiere a servicios online, no hay mucho margen de maniobra que digamos. Plataformas como Google, Facebook y Microsoft ofrecen servicios gratuitos a cambio de una constante recolección de datos utilizada con el objetivo de personalizar anuncios publicitarios y mejorar dichos servicios en el proceso. El problema es cuando la recolección cruza un límite que nos hace sentir incómodos, y en el caso específico de Google, el ejemplo es Gmail. Cada correo enviado y recibido es escaneado «en contenido y contexto» para presentar publicidad más relevante al usuario. Google debió enfrentar varias demandas y desactivar la lectura en sus aplicaciones educativas, pero ahora eso se expandirá al resto de los usuarios antes de que termine el año.
Lo que busca Google es unificar sus métodos de personalización entre el Gmail convencional, las aplicaciones educativas, y la sección comercial de su plataforma G Suite. En todos los casos, la publicidad estará basada en parámetros específicos que el usuario haya configurado dentro de su cuenta. Esos parámetros pueden ser verificados a través de este enlace, que también incluye la posibilidad de desactivar la personalización por completo. En lo personal, creo que es preferible limitar los resultados a un par de categorías ingresadas manualmente, a dejar que los algoritmos entreguen resultados de muy baja calidad.
Aún así, el chequeo de correos en Gmail continuará para indexar el contenido, aplicar filtros, detectar spam y eliminar malware. Al mismo tiempo, la función Smart Reply en la versión móvil de Gmail (presentada a mediados de mayo) analiza el contexto de cada correo y ofrece una respuesta rápida automática.