Mucho se habla de los ordenadores cuánticos y del hardware que los hará posible. Cada vez que leemos alguna noticia sobre el tema, nos da la impresión de que faltan décadas para que algún proyecto en ese campo se convierta en algo útil. Sin embargo, Google se acaba de embarcar en el desarrollo de un algoritmo de búsqueda cuántico, capaz de hacer su magia de una forma mucho más eficiente que los algoritmos de búsqueda tradicionales. ¿Podrá Google, finalmente, hacer algo útil con la informática cuántica?
Pocas veces nos detenemos a pensar en el proceso que se esconde detrás de cada “click” que hacemos en el botón “buscar” de la página principal de Google. Prolijamente ordenados en los nodos de una de las redes de ordenadores más grandes del mundo -y desperdigados en decenas de países- se encuentran los datos de millones de sitios que son consultados cada vez que se solicita una búsqueda. Ese proceso se lleva a cabo millones de veces por hora, y constituye un verdadero milagro de la informática. Sin embargo, a pesar de que todo funciona lo suficientemente bien como para que Google siga posicionado firmemente como líder del sector, la empresa sigue buscando formas de mejorar.
Dentro de ese marco, acaba de ensayar lo que se conoce un “algoritmo de búsqueda cuántico”, una pieza de hardware y software que puede hacer el trabajo de una manera mucho más eficiente que los algoritmos de búsqueda tradicionales. Para tener una idea de la magnitud de su potencia, mientras que una búsqueda “tradicional” requiere de 500.000 intentos, el algoritmo cuántico solo necesita de 1.000. En pocas palabras, la computación cuántica -al menos en este caso- es 500 veces más eficiente que la tecnología que Google utiliza hoy. El secreto, obviamente, consiste en utilizar qbits (bits cuánticos) en lugar de bits. Estos verdaderos engendros de la física son capaces de representar ambos estados -0 y 1- al mismo tiempo, haciendo los procesos mucho más rápidos. El ejemplo resuelto por Google se conoce como “ algoritmo Grover” y consiste en encontrar una bola determinada escondida en 1 cajón que contiene un millón.
Google ha utilizando en sus pruebas un ordenador cuántico creado por la compañía canadiense D-Wave. Si se implementara algo así para ayudar en la búsqueda de imágenes -por ejemplo- el software podría resolver las búsquedas de imágenes hasta 20.000 veces más rápido que los programas que la empresa utiliza hoy día. Por lo visto, puede que Google también se anote un tanto en este juego.