Desde hace un tiempo se sabe que en los pasillos de Mountain View, la presencia de Linux entre terminales y servidores es muy amplia. La distro más popular dentro del ejército de empleados de Google es Ubuntu, y con el paso del tiempo, a estas instalaciones se las pasó a conocer como Goobuntu. A partir de allí se han dicho muchas cosas de esta “versión especial” de la distro, pero ha sido nada menos que Thomas Bushnell (sí, el mismo Bushnell de GNU Hurd) quien se ha encargado de hacer explotar la burbuja: En esencia, si tienes al último LTS de Ubuntu, estás usando a Goobuntu.
No hay ninguna razón para dejar de pensar que cada empresa tiene su cuota de proyectos secretos de acceso exclusivo para las más altas esferas, o dejar a un lado nuestra imaginación al creer que cada cuartel general es una especie de “Eureka” en miniatura. Algunos secretos deben ser muy bien guardados, por el simple hecho de que la competencia es durísima, y cualquier ventaja será explotada de inmediato por los rivales. Aún así, parece haber ocasiones en las que dichos secretos no llegan a estar a la altura de las circunstancias. Uno de ellos probablemente sea Goobuntu, una distro basada en Ubuntu, de uso interno en Google. Se ha dicho mucho sobre esa distro, pero fue Thomas Bushnell, mente maestra detrás de GNU Hurd y actual administrador principal de sistemas Linux en Mountain View, quien aprovechó la última LinuxCon a finales de agosto para enseñar Goobuntu a los presentes.
Tomando las propias palabras de Bushnell, Goobuntu es “simplemente un skin liviano” sobre Ubuntu. Como era de esperarse, en Google se concentran sobre las versiones LTS de Ubuntu, debido a su soporte extendido y a la sincronización entre las actualizaciones LTS y los ciclos de recambio de hardware en Mountain View. Algo interesante es que la utilización de Ubuntu (o Goobuntu en este caso) es recomendada, aunque no obligatoria. Los empleados pueden utilizar las herramientas que deseen, y la única excepción es que deben pedir autorización previa en el caso de Windows por razones de seguridad. Ante la pregunta sobre si los empleados de Google recurren a Unity como interfaz principal, Bushnell dijo que los usuarios están “sobre todo el mapa”, desde KDE y GNOME hasta X-Window. No existe una interfaz de facto bajo Goobuntu, aunque reconoce que muchos usuarios de Mac están viendo con buenos ojos a Unity últimamente.
Lo más interesante sobre Goobuntu es la cantidad de usuarios que posee, cerca de la mitad sobre un total de 20 mil empleados. A la hora de administrar semejante base de sistemas, en Google utilizan Puppet, que les permite reaccionar con la rapidez necesaria, ya que un reinicio no programado podría “costar un millón de dólares”. Obviamente, la seguridad posee un valor muy alto dentro de Mountain View, y Goobuntu tiene algunos detalles técnicos adicionales frente a su contraparte de consumo general, comenzando por el uso de un sistema de autenticación interno, y la ausencia de ciertos paquetes que requieren enviar información a un servidor externo (al estilo de Ubuntu One). Ahora, esto no quiere decir que Google simplemente usa a Ubuntu y ya. El gigante de Mountain View es parte del programa Ubuntu Advance, contribuye a su desarrollo y escribe parches, pero aún con ese nivel de intervención, Chris Kenyon, vicepresidente de ventas en Canonical, admitió que Google “no es el cliente más grande” de Canonical. En resumen, quien desee a Goobuntu, no tiene más que descargar el LTS, limpiarlo un poco y escoger cualquier interfaz, porque el Goobuntu propiamente dicho no estará disponible al público.